Pirotecnia en Nochevieja: "Ya no se lleva tanto el ruido sino el color"
Miles de familias celebrarán la entrada del Año Nuevo entre ruido, luz y color
“A mí me encanta el ruido y él prefiere la luz y el color.” Así resumen Joel y Fernando, dos ecuatorianos que viven juntos en Donostia, su manera de celebrar la llegada del nuevo año. Ambos han acudido este viernes a la tienda CM Petardos, en Donostia, para comprar artefactos antes de Nochevieja. Para ellos, dar la bienvenida a un nuevo año entre ruido y color es una tradición: “En nuestro país se celebra ‘la quema del Año Viejo’, y es una tradición quemar un muñeco que se rellena de petardos y cohetes diferentes”.
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Entre risas, aseguran que hacen el tándem perfecto, porque a cada uno le gusta lanzar un tipo de artefacto. Aseguran que siempre lo hacen siguiendo las indicaciones recibidas en la tienda. “Teníamos idea de lanzar los cohetes desde el balcón, pero nos han dicho que uno de ellos es mejor lanzarlo desde la calle, por seguridad”.Más allá de la broma, no pierden de vista la responsabilidad, y son conscientes de que “un mal uso puede terminar en un problema muy grande”.
Esa misma conciencia es la que trata de difundir estos días Thiago Peguero, responsable de la tienda, que confirma el aumento de las ventas a las puertas de la Nochevieja: “La gente se acuerda estos últimos días de los petardos y el número de clientes sube mucho”. Respecto a las opciones preferidas de los clientes, cuenta que cada vez hay más interés por productos que no hagan tanto estruendo. “Las baterías de baja sonoridad, que no hacen tanto ruido, y el tema de las candelas o bengalas y cosas que hacen luz y color para los niños se están vendiendo mucho”. “Ya no se lleva tanto el ruido, sino el color”, añade.
Celebración en familia
Muchos clientes confirman la tendencia. Andoni, que acude a comprar petardos acompañado por sus hijas “pensando en la diversión familiar”, explica que “compramos sobre todo petardos de colores y luces para que los más pequeños pasen un buen rato”. A su gusto por la luz y el color, leañade que en la familia siempre intentan ser respetuosos con el vecindario. Su objetivo es claro: “Celebrar la entrada del Año Nuevo de una forma divertida, pero con medida”. Haciendo alusión a los últimos incidentes registrados en diferentes municipios, recuerda que “es importante saber convivir con la gente de alrededor en estos días también, ya que pueden surgir graves problemas”.
Gotzon y Amets, padre e hijo, también repetirán tradición esta Nochevieja. Este año se han decantado por las baterías, porque “tienen diferentes cohetes, ruido y luces, y es lo más divertido para los niños”. En su caso, y aunque compren cada fin de año, siemprellegan abiertos a recibir sugerencias de los profesionales: “Notenemos una idea clara y solemos cambiar de petardos dependiendo de lo que veamos”. Padre e hijo también reparten preferencias. Gotzon prefiere la luz, mientras que Amets, el pequeño de la casa, prefiere el ruido. En su caso, viven en una zona aislada, y son sabedores de que los artefactos que compran son aptos para lanzarlos en un lugar así. “Sabemos que podemos lanzar estos petardos allí, pero aún y todo tratamos de mantener ciertas medidas de seguridad”.
Indicaciones
Peguero confirma que recomendar e indicar a los clientes es parte de su trabajo diario. “A todos los clientes les preguntamos dónde van a lanzar los petardos o cohetes, y después, comenzamos a mostrarles el catálogo de lo que pueden lanzar en ese lugar”. En ese acompañamiento, recuerda algún caso extremo en el que “un cliente nos dijo que tenía intención de lanzar una batería desde el balcón, y eso es muy peligroso”. En casos así, desde la tienda recomiendan cambiar el tipo de petardos o, si quieren lanzar esos petardos, cambiar de ubicación para hacerlo.
La afición de los guipuzcoanos a los petardos es grande, y el gasto medio, explica Peguero, ronda los 60-70 euros por cliente, aunque hay quienes gastan más y quienes se llevan lo mínimo para celebrar la entrada del Año Nuevo. A las puertas de una nueva Nochevieja, el responsable de la tienda hace un llamamiento a la sociedad y subraya que “el material pirotécnico se debe comprar y vender en tiendas especializadas, que es donde se pasan inspecciones periódicas y pueden dar indicaciones más precisas al cliente”.
Entre ruido, luces, tradiciones importadas y nuevas tendencias, la Nochevieja en Gipuzkoa se prepara para brillar. Clientes como Joel, Fernando, Andoni, Gotzon o Amets coinciden en algo esencial: disfrutar del espectáculo, pero “con cabeza” y sin olvidar que la fiesta también se comparte con quienes están alrededor.
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