Desde el final de la pandemia, la población en Gipuzkoa sigue al alza gracias a la llegada de migrantes, que contrarrestan la caída de la natalidad en el territorio y el envejecimiento de la población. El pasado año llegaron a Gipuzkoa 5.477 personas más, un dato que, no obstante, supone un descenso del saldo migratorio de hasta el 10,2% con respecto a 2023.

Según los datos elaborados por el Instituto Vasco de Estadística, Eustat, dados a conocer este viernes, el saldo migratorio en Euskadi continúa siendo positivo, con un aumento en 20.870 personas. No obstante, se trata de un ligero descenso, del 0,3%, con respecto al ejercicio anterior, ya que ha aumentado el número de emigraciones un 1,2%.

En Gipuzkoa, el balance es positivo en 5.477 personas, aunque se registra el descenso más acusado de la CAV, de un 10,2%. En su capital, Donostia, la población creció en 1.533 personas.

En total, en Euskadi se produjeron 58.977 inmigraciones frente a las 58.568 que tuvieron lugar en 2023, dato que supone un aumento del 0,7%. El número de emigraciones, en cambio, aumentó un 1,2%, pasando de 37.640 en el año anterior a 38.107 en 2024.

Se presenta, además, una tendencia ligeramente positiva, ya que de enero a junio se aumentó en 10.230 personas y en la segunda mitad del año la cifra fue superior, con 10.640 personas. Este incremento se debe mayoritariamente a la comunidad extranjera, que crece un 0,25% con 19.162 personas más, frente al descenso del 5,8% en relación a los movimientos entre Euskadi y el resto de comunidades autónomas, con un saldo positivo de 1.814 personas.

La movilidad geográfica externa o extracomunitaria se mantiene estable, con 44 habitantes por cada 1.000, con un incremento del 0,3% en Gipuzkoa. En Bizkaia, el saldo migratorio es de 11.845 personas y en Araba de 3.548.

Perfil de migrantes y emigrantes 

Entrando en detalle, las comunidades autónomas con mayor polo de fueron Castilla y León, Madrid, Cantabria, Catalunya y Andalucía, de las que se recibieron el 57,3% de las personas. El total de migraciones a otras comunidades autónomas, por su parte, fue de 19.322 personas.

Las mismas comunidades autónomas fueron las que más inmigrantes aportaron, con Madrid a la cabeza, seguida por Castilla y León, Andalucía, Catalunya y Cantabria. Andalucía, con 673 personas, presenta el saldo más positivo de todas ellas, mientras que Castilla y León, con 234, el más negativo.

La edad media de los inmigrantes, por su parte, se incrementa hasta los 33,3 años y el de las emigrantes hasta los 37,4 años. Los jóvenes siguen siendo, como es habitual, los que más llegan y se van de Euskadi, siendo los de 25 a 29 años el 15,3% de las inmigraciones y el 13,8% de las emigraciones; y el de los 30 a 34 años el 12,9% de las inmigraciones y el 13,1% de las emigraciones.

Aumentan también las diferencias de sexos, siendo mayoría los hombres tanto en migraciones (53,1%) como emigraciones (54,1%). Ocho de cada diez inmigrantes extranjeros lo hicieron, además, desde su país de origen mientras que casi tres de cada cuatro emigrantes se fueron a otro país.

Cambios de residencia

A pesar de estos datos, el 60,3% de los cambios de residencia se producen dentro de Euskadi. En 2024 se contabilizaron 244.809 cambios, de los que 91.318 fueron en el mismo municipio. La movilidad intracomunitaria, es decir, la que tiene como origen y destino los distintos municipios de la CAV, por su parte, ascendió a 56.407 movimientos.

Por último, Asimismo, se registraron 58.977 inmigraciones externas o extracomunitarias, de las que 37.947 provinieron del extranjero, un 2,3% más que en 2023; y se produjeron 38.107 emigraciones externas o extracomunitarias o, lo que es lo mismo, variaciones residenciales originadas en un municipio y con destino fuera de la misma.