El planeta encadena 11 años de calor récord y 2025 será el segundo o tercero más cálido
La OMM dice que sin una acción inmediata y masiva sera “prácticamente imposible” limitar el calentamiento global a 1,5 °C
El calentamiento del planeta es imparable y año tras años registra temperaturas de récord. El último informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) advierte de que estamos en una fase crítica y que el impacto del cambio climático es cada vez más profundo sobre los ecosistemas, con incendios e inundaciones más devastadores, y, por ende, las economías.
Entre 2015 y 2025, todos los años se cuentan entre los 11 más calurosos desde que existen registros y este va camino de convertirse en el segundo o tercero más cálido.
La temperatura media entre enero y agosto de este año se situó 1,42 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales, y los últimos tres años figuran ya como los más cálidos de los que se tiene constancia.
Un indicador de que el calentamiento global se acelera de forma progresiva son las concentraciones de los principales gases de efecto invernadero. Las concentraciones de dióxido de carbono o CO2, metano y óxido nitroso en 2024 alcanzaron niveles nunca vistos, y todo apunta a que este año los superará. En concreto, el CO2, el gas que más contribuye al calentamiento del planeta, llegó a 423,9 partes por millón (ppm), un 53 % más que antes de la Revolución Industrial.
El calor oceánico también avanza a un ritmo alarmante. En 2025 ya se ha superado la “excepcional” tasa de calentamiento marino del año pasado. Más del 90 % del exceso de energía generado por el efecto invernadero se acumula en los mares, provocando tormentas como las danas que sufre el este peninsular y que cada vez son más intensas y frecuentes, y una subida acelerada del nivel del mar, que ya crece a 4,1 mm por año, casi el doble que en los noventa.
El hielo marino sigue sufriendo el azote de las temperaturas extremas. La extensión del hielo marino del Ártico alcanzó su máximo anual en marzo pasado, con 13,8 millones de kilómetros cuadrados, siendo el valor más bajo desde que existen registros.
En cuanto a la Antártida, alcanzó su tercer valor más bajo tanto para el mínimo anual de febrero de 2025 (2,1 millones de km2) como para el máximo anual registrado en septiembre de 2025 (17,9 millones de km2).
Y los glaciares se derriten a un ritmo sin precedentes: el año pasado perdieron 450 gigatoneladas de hielo, equivalente a 1,2 mm de subida del nivel del mar, siendo la mayor pérdida desde 1950.
No rebasar los 1,5 C
Ante esta situación, la OMM urge a llevar a cabo acciones inmediatas y masivas dirigidas a poner freno a la subida de las temperaturas y alcanzar los objetivos del Acuerdo de París, que establece limitar el calentamiento global 1,5 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales.
“Esta insólita racha de altas temperaturas, combinada con el aumento récord de las concentraciones de gases de efecto invernadero del año pasado, deja claro que será prácticamente imposible limitar el calentamiento global a 1,5 °C en los próximos años sin que las temperaturas superen transitoriamente ese umbral”, advirtió Celeste Saulo, secretaria general de la OMM, quien, no obstante, se mostró confiada en que “la ciencia es tajante al afirmar que todavía es completamente posible”.
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, alertó de los “daños irreversibles” en las economías. “En cada año en que se supere el umbral de 1,5 °C las economías se verán severamente afectadas, se exacerbarán las desigualdades y se producirán daños irreversibles. Debemos actuar ahora, con gran rapidez y a gran escala, para que el rebasamiento sea lo más pequeño y breve posible”, dijo António Guterres en su intervención.
En definitiva, la ventana para contener el calentamiento de la Tierra sigue abierta, pero se estrecha rápidamente.