Cinco años por agredir a un hombre con una botella en el exterior de una discoteca de Irun
El inculpado tiró al suelo a la víctima y le propinó una patada en el esternón
Un varón ha sido condenado este lunes a penas que suman cinco años de cárcel por agredir en el exterior de una discoteca de Iruna otro hombre, al que golpeó con una botella rota en la mandíbula y le propinó una patada en el esternón tras haberlo tirado al suelo.
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Previamente, el encausado había amenazado con la misma botella a una pareja con la que el agredido y su novia habían estado celebrando un cumpleaños dentro de la sala de fiestas.
Inicialmente, la Fiscalía reclamaba once años de prisión para el acusado, aunque durante el juicio por estos hechos, celebrado en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa, ha reconocido los hechos y se ha conformado con los cinco años solicitados finalmente por el Ministerio Público.
Según han indicado fuentes del caso, el inculpado ha sido condenado como autor de un delito de lesiones agravado por el uso de un objeto peligroso, así como por un delito leve de maltrato de obra y por dos delitos de amenazas no condicionales con la atenuante de intoxicación etílica.
Asimismo, deberá abonar una multa de 90 euros y compensar al perjudicado con 20.476 euros por los daños y lesiones sufridas.
Discusión por el móvil
Los hechos sucedieron sobre las 6.00 horas del 6 de noviembre de 2022, momento en el que las dos parejas se encontraban en la discoteca y el acusado inició una discusión con la víctima porque, según el escrito de la Fiscalía, pensaba que le había quitado el móvil.
Un contexto en el que el procesado, natural de la República Dominicana y en situación irregular en España, se puso cada vez más agresivo, hasta arrojar a su oponente "un vaso con líquido" y propinarle una patada en el estómago.
En ese momento, intervinieron los trabajadores del local para acompañar a la víctima y a su novia fuera de la sala de fiestas, donde ya se encontraba la otra pareja con la que estaban de celebración.
Poco después, el procesado también salió a la calle y rompió una botella contra una farola para amenazar con ella e insultar a los dos miembros de esta pareja, llegando a dirigir el arma contra el varón "haciendo ademán de clavársela" y rompiéndole la chaqueta.
Seguidamente, se volvió con la botella hacia la víctima y comenzó a forcejear para intentar golpearle con ella, hasta que el perjudicado cayó al suelo y "logró alcanzarle con la botella en la zona de la mandíbula", tras lo que le pegó "una patada en el esternón".
A raíz de esta agresión, el damnificado fue trasladado al Hospital Universitario Donostia, donde recibió atención quirúrgica ya que presentaba una herida incisocontusa compleja en el mentón "con múltiples cortes de diferente profundidad en la región anterior del cuello", entre otras lesiones.
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