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SOS de la Diputación: se necesitan 28 familias de acogida de urgencia

La portavoz foral vuelve a hacer un llamamiento ante la situación de varios menores que precisan un hogar transitorio

SOS de la Diputación: se necesitan 28 familias de acogida de urgenciaIker Azurmendi

La Diputación de Gipuzkoa ha señalado este miércoles que se necesitan deforma urgente 28 familias de acogida para menores, las cuales 10 son para niños de entre 0 y 3 años y el resto para menores de 6 años.

La portavoz foral, Irune Berasaluze, ha señalado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que, tras la llamada realizada a principios de septiembre 39 personas se han interesado y han solicitado información sobre la acogida.

En la actualidad, 85 niñas, niños y adolescentes necesitan vivir en familia en Gipuzkoa, ha precisado Berasaluze, que ha explicado que la Diputación tutela a 885 menores, de los cuales 556 residen en centros y 329 conviven con familias de acogida.

El acogimiento familiar "es fundamental para garantizar el bienestar de estos menores en situación de vulnerabilidad", ha indicado Berasaluze, que ha reconocido que "no se trata de un camino sencillo, ya que conlleva dudas, retos y miedos, pero también aporta ilusión, valentía, compromiso y, sobre todo, mucho cariño".

"Abrir las puertas del hogar significa ofrecer afecto y estabilidad a quienes más lo necesitan, y refleja la capacidad solidaria y responsable de la comunidad guipuzcoana", ha añadido.

Es un acto altruista de integración temporal, que no es una adopción, ni un paso previo a ella, sino una medida de protección adaptada a cada situación, ha subrayado.

Las personas interesadas pueden obtener información en el teléfono 682 554 433 o a través de la página web www.gipuzkoa.eus.

En Gipuzkoa existen tres modalidades de acogida: la urgente, de hasta seis meses de duración, destinada a casos que requieren evaluación inmediata; la temporal, de hasta dos años, dirigida a menores cuya familia de origen tiene posibilidades de recuperación; y la permanente, cuando no se prevé el retorno al hogar en el corto plazo.