El sector funerario ha vivido en los últimos años una transformación que va más allá de la atención tradicional al difunto. Hoy en día, el enfoque se ha desplazado hacia el acompañamiento emocional de las familias, quienes requieren no solo servicios logísticos, sino también apoyo en un momento tan delicado como es la despedida de un ser querido. En este cambio, Funeraria Vascongada-Mémora ha jugado un papel fundamental, apostando por la cercanía, la empatía y la profesionalización de sus equipos para ofrecer un servicio integral y, sobre todo, humano.

Un cambio hacia la cercanía y la empatía

El sector funerario ha evolucionado significativamente, dejando atrás la visión puramente operativa para poner el foco en las necesidades emocionales de las familias. “Nos preocupamos por el difunto, pero el foco pasa a ser la familia, que es quien vive la pérdida”, afirma Andoni Pérez, gerente de Mémora Gipuzkoa. Este giro ha permitido transformar las ceremonias en actos personalizados, donde la empatía, la ternura y la voluntad de conectar con las emociones de los seres queridos se han convertido en valores diferenciales.

Christine O'Dowd Elustondo, asesora funeraria en Mémora Zarautz, destaca la importancia de la empatía en su trabajo: "En mi caso, optar por trabajar en el sector funerario fue totalmente vocacional. Me gusta ayudar a las familias y acompañarles en el momento de despedirse de sus seres queridos. Es un momento muy delicado para las familias y lo agradecen mucho", explica Christine, quien lleva casi una década trabajando en el sector. En su experiencia, ser capaz de ofrecer un servicio cercano es fundamental para ayudar a las personas en ese trance.

Por su parte, Ainara Redondo Huarte, asesora funeraria en Irun-Hondarribia, señala cómo la conexión con las familias se ve reforzada por la cercanía que otorga el ser parte de la comunidad. "Después de 13 años trabajando en la comarca, muchas familias ya me conocen, lo que crea una gran conexión y empatía. No es solo el momento de la despedida, sino el acompañamiento que ofrecemos incluso después de la ceremonia", explica Ainara.

Servicios funerarios Memora 2 Raquel Benito Romero

La importancia de la profesionalización

En paralelo a este enfoque emocional, el sector funerario ha apostado por la profesionalización de sus equipos. La formación continua y el desarrollo de nuevas habilidades se han vuelto cruciales para garantizar un servicio de calidad. Así, la incorporación de personal cualificado y la mejora de la formación del equipo han sido clave para la evolución de las empresas funerarias. María Scafoglio Toledo, que lleva casi seis años trabajando en Mémora, refleja cómo la versatilidad es una de las características más destacadas de su día a día: "Nunca sabes el volumen de trabajo ni el tipo de servicios con los que te vas a encontrar, pero cada día es diferente y te permite aprender constantemente", comenta María.

Un sector cada vez más humano

Estas tres profesionales de Mémora Gipuzkoa evidencian una tendencia clara: el sector funerario se ha humanizado, y cada vez más los trabajadores están mejor preparados para dar el apoyo necesario a las familias. "Creo que desempeñamos una gran función en la sociedad, ofreciendo apoyo a las familias en los duros momentos del duelo", subraya María, quien reconoce la dificultad de hablar de la muerte, un tema que sigue siendo un tabú para muchas personas.

Asimismo, Christine, Ainara y María coinciden en que la percepción social sobre el trabajo en una funeraria ha cambiado con el tiempo. "Hay mucha gente que le tiene un poco de respeto a esta profesión, porque le tienen miedo a la muerte. Pero nosotros lo tenemos más normalizado y, gracias a ello, podemos apoyar a las personas que lo necesitan", concluye Christine.

Este cambio de enfoque, que pone al ser humano en el centro, ha permitido que las familias vivan el proceso de despedida de una manera más llevadera. Mémora ha sabido integrar la cercanía con la profesionalización de sus servicios, ofreciendo un acompañamiento personalizado y humano que transforma los momentos más difíciles en una experiencia de apoyo emocional y respeto. En definitiva, Mémora es el reflejo de un sector funerario que, lejos de ser un simple servicio, se ha convertido en un verdadero apoyo para las familias, dejando una huella imborrable en los corazones de quienes pasan por su cuidado.

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