El de la construcción y la vivienda es un tema que aparece en los medios de comunicación de forma recurrente y en clave de problema: la escasez de suelo, la subida de las hipotecas, los altos precios del alquiler… Pero también es cierto que se trata de un sector que tiene la mirada puesta en la búsqueda de soluciones innovadoras para construir casas más sostenibles y saludables para las personas. Así ha quedado patente en el foro Construcción, rehabilitación y vivienda, organizado por NOTICIAS DE GIPUZKOA, con el apoyo de Onhaus Global System y Orona Ulahi y la colaboración de Proyectos Echarri y Big Mat Ariceta. El encuentro, cuyo objetivo ha sido desgranar los importantes desafíos que enfrenta el sector en la actualidad, se ha celebrado en el espacio Kutxa Kultur de Tabakalera, en Donostia.
La sostenibilidad y la accesibilidad fueron las claves sobre las que giraron las reflexiones de una de las dos mesas redondas celebradas en el marco del foro Construcción, rehabilitación y vivienda. Bajo el título Visión de una rehabilitación integral, este espacio de diálogo contó con la participación de Koldo Monreal, CEO de Onhaus Global System; Ander Tubilla, responsable de Conservación de Orona; y Javier Montero, presidente del Colegio de Administradores de Fincas de Gipuzkoa y Araba.
Tomó la palabra en primer lugar el representante de Orona, quien remarcó que la mejora de la accesibilidad se ha convertido en una prioridad. “El envejecimiento de la población es una realidad y es por eso que mejorar la accesibilidad se ha convertido en una necesidad prioritaria”, introdujo. “Antiguamente, los portales se diseñaban con entradas elevadas, con escaleras, que les otorgaba un aire más señorial. En ese sentido, muchas de las renovaciones que hacemos van en la línea de bajar los ascensores a cota cero, con el fin de eliminar barreras arquitectónicas”, explicó.
Por otra parte, Tubilla mencionó que el desarrollo de nuevas tecnologías permite al sector caminar por la senda de la sostenibilidad: “La tecnología nos permite hacer fosos más reducidos, en lugares que a priori no estaban diseñados para albergar un elevador. Además, trabajamos con máquinas eléctricas, que son mucho más eficientes que las hidráulicas, y tienen motores de menor tamaño, lo que nos permite diseñar cabinas más grandes”.
El CEO de Onhaus Global System, por su parte, confesó que llegó al mundo de las passive house “por casualidad”, cuando en plena crisis económica estaba en proceso de construcción de su casa y un amigo le recomendó optar por hacer una casa pasiva. “Estaba construyendo una casa nueva y me di cuenta de que realmente era una casa vieja”, recordó. “Tenemos que contribuir entre todos a que las personas vivan mejor, sin humedades, sin problemas respiratorios. Esto es una mejora para todos y es responsabilidad de todos”.
Tras estas reflexiones sobre mejorar la accesibilidad, la sostenibilidad y el bienestar de las personas, el presidente del Colegio de Administradores de Fincas de Gipuzkoa y Araba opinó que “más allá de estas cuestiones, a las comunidades de vecinos lo que les motiva a hacer cambios o mejoras es la ITE (Inspección Técnica de Edificios), y partir de ahí es cuando podemos hablar de eficiencia energética”. En cuanto a la importancia de promover espacios accesibles, Montero fue tajante: “No hay nada más triste que una persona no pueda salir de su casa porque tiene problemas de movilidad”.
La conversación entre los ponentes fue distendida y enriquecedora, y dio lugar al relato de diversas anécdotas. Monreal contó el caso de la fallida rehabilitación de una bonita villa. “Se había reformado por completo, pero el suelo condensaba. Se había mojado la envolvente y el punto frío era el suelo. ¿Se podía haber evitado esto? Sí, midiendo. Otro de los casos que me he encontrado hace poco es el de una comunidad que se ha gastado más dinero en el andamiaje que en la obra de rehabilitación en sí, que ha consistido en pintar la fachada. ¿Es esto un proyecto de rehabilitación?”, interrogó. “Sabemos más de coches que de casas, cuando ésta es la inversión más importante de nuestra vida. Muchas veces desconocemos qué estamos comprando y esto es un problema”, lamentó.
Sobre el desconocimiento que tenemos cuando adquirimos una nueva vivienda, Montero contó que ha sido testigo de comunidades de casas de nueva construcción en las que al mes de instalarse a vivir “había vecinos que habían tapado las rejillas porque les entraba frío o malos olores”.
Ante esta situación, el Ceo de Onhaus denunció que esto ocurre “por desconocimiento y por una mala ejecución debido a un dimensionado incorrecto”. “Se dice que somos lo que comemos, y comemos entre tres y cinco veces al día. Si pasamos las 24 horas del día respirando, analicemos cómo nos afecta el aire que nos rodea”, reflexionó Monreal, quien aclaró que la diferencia de coste entre una casa tradicional y una casa pasiva es tan solo de entre el 5 y 8%.
Tubilla añadió que “es fundamental rodearse de buenos profesionales, porque hacer las cosas bien no es más caro, pero hacerlas mal, sí”.
