El Gobierno Vasco, en colaboración con Elkargi, ha puesto en marcha el proyecto de Calificación de Sostenibilidad para Pymes Euskadi ESG, que permitirá medir, evaluar y acreditar la sostenibilidad de las pequeñas y medianas empresas de Euskadi. En una primera fase de este proyecto, pionero en el Estado, se han seleccionado 500 pymes socias de Elkargi de diferentes tamaños y sectores con la idea de tener una muestra suficientemente significativa. Tras la fase de análisis, recibirán un informe avalado por un analista certificado por la Asociación Europea de Analistas Financieros (EFFAS) y por un supervisor de Sociedad de Tasación.

Este informe contendrá la calificación global obtenida por la empresa y el desglose de las calificaciones parciales de los aspectos ambientales, sociales y de gobernanza, así como una información adicional complementaria con una serie de recomendaciones para la mejora de su calificación en el futuro, entre otros aspectos. Con ello, dispondrán de una mejor posición para acceder a fuentes de financiación, donde cada vez es más necesario ese compromiso con la sostenibilidad.

“Si bien esta valoración no es actualmente necesaria, queremos ahora, con la ayuda de esta iniciativa Euskadi ESG, que las pymes empiecen también esa transición para poder superar sus retos presentes y futuros en un planeta finito e interconectado”, han indicado sus promotores. 

Compromiso con los ODS

Asimismo, sus impulsores han destacado la apuesta del Gobierno Vasco con los ODS y el compromiso con la sostenibilidad. “El Gobierno Vasco lidera de modo compartido con todos los agentes una gran transformación enmarcada en los ODS de la Agenda 2030 que se caracteriza por una transición social, energética y digital. Este camino es compartido con la Estrategia Europea Next Generation EU, que busca la digitalización y neutralidad en carbono”.

En este propósito sostenible, el Departamento de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco comenzó su estrategia de financiación sostenible en 2018 sacando a mercado su primer bono sostenible. “Nuestro objetivo fue y sigue siendo la diversificación de las fuentes de financiación que nos puedan aportar mayor garantía financiera en un horizonte de largo plazo”, han puesto en valor. 

Tras esta fase piloto, la idea es analizar los resultados para extraer las conclusiones que permitan decidir cómo extenderlo al resto de Pymes. Este proyecto cuenta con la participación de las siguientes entidades financieras: Kutxabank, Caja Laboral, BBVA, Caixabank, Banco Santander, Abanca Bankoa, Caja Rural de Navarra, Banco Sabadell, Bankinter y Fiare.