En un mundo donde la demanda de energía continúa aumentando y los recursos naturales se agotan rápidamente, la educación y la sensibilización sobre cuestiones energéticas resultan imperativas. La adopción de prácticas sostenibles son necesarias para garantizar un futuro energético seguro y sostenible para las nuevas generaciones. Iniciativas comunitarias, programas educativos, acciones contundentes… se están llevando a cabo en Euskadi con el fin de que esta lluvia de nuevas soluciones energéticas riegue y se filtre hasta la parte más profunda de la sociedad. 

Se están llevando a cabo en Euskadi iniciativas comunitarias, programas educativos, acciones contundentes…

Así pues, la Secretaría General de Transición Social y Agenda 2030 ha asumido la promesa de hacer pedagogía activa del ahorro energético como un compromiso cívico y concreto con la sostenibilidad y la Agenda 2030 y, para ello, utiliza campañas de concienciación sobre la oportunidad de adoptar cambios en la vida cotidiana que contribuyan a reducir el gasto de energía. Y es que, los grandes cambios son necesarios, pero los pequeños cambios, los que se aplican a nivel individual, modificando comportamientos, hacen grandes diferencias.

En el Día Mundial de la Energía, que se instituyó en 1949 con el objetivo de concienciar a la sociedad sobre la importancia de hacer un uso responsable y eficiente de los recursos energéticos, es preciso apelar a la responsabilidad individual y colectiva para usar la energía de forma eficiente generando el menor impacto en nuestro entorno.

Las luces leds reducen el gasto energético. Pexels

Cabe destacar que España cerró 2023 con un nivel mínimo histórico de emisiones de CO2, inferior, incluso a los de 1990, como refleja el estudio de emisiones adelantadas 2023, realizado por el Observatorio de la Transición Energética y la Acción Climática (OTEA), aunque la cifra definitiva la publicará el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a lo largo de este año. No obstante, es importante mantener esta reducción cada año hasta 2030 para cumplir con los objetivos manifestados en el Acuerdo de París. De hecho, garantizar el acceso a una energía asequible y no contaminante constituye la séptima meta dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

Uso responsable de la energía

La educación sobre energía no solo implica la comprensión de las fuentes de energía y su impacto en el medio ambiente, sino también la promoción de hábitos energéticos responsables en la vida cotidiana. Evitar el derroche de energía es beneficioso para el planeta y para el bolsillo, por lo que se deben revisar nuestros hábitos; desde apagar las luces innecesarias hasta utilizar electrodomésticos eficientes, cada pequeña acción cuenta en la reducción del consumo. 

Desde la OCU recomiendan desenchufar los aparatos que no se utilizan, apagar todo lo que se queda en stand-by (teles, ordenadores, equipos de música...), usar bombillas led, apagar las luces cuando se sale de la habitación, o priorizar los programas Eco en la lavadora y el lavavajillas. Si hay intención de renovar algún electrodoméstico, buscar modelos eficientes, con etiqueta energética A o B. Asimismo, se recomienda no usar la lavadora o el lavavajillas a más de 40 ºC ya que representa un 40% de ahorro de energía. Si se llena la lavadora al 95% en lugar de al 80%, se podrá ahorrar al año más de 1.800 litros de agua. Por tanto, es preferible esperar a tener ropa suficiente para llenar la lavadora. Por otra parte, el prelavado resulta inútil (salvo en casos de ropa excepcionalmente sucia).

Si hay que comprar un nuevo electrodoméstico, que sea con etiqueta energética A o B.. Pexels

Lo mismo ocurre con el lavavajillas; el programa de media carga no resulta interesante, es mejor esperar a llenar el electrodoméstico. También recomiendan limpiar el filtro con regularidad con el fin de disminuir el consumo energético. Poner agua en el fondo de las cacerolas cuando aún están calientes actúa como prelavado ya que evita que se reseque la comida.

En cuanto a la temperatura del hogar, mantener una temperatura en casa de 19ºC a 21ºC durante el día y entre 15ºC y 17º por la noche, evitará el exceso de gasto energético; cada grado de más supone un incremento del 7% en el consumo. Otros aspectos como mantener la caldera en buen estado o purgar los radiadores y tenerlos limpios sin muebles que los tapen evitan que merme la transmisión de calor y se genere más gasto energético.

Otros elementos a tener en cuenta

Además de todo aquello que podemos realizar en el hogar, hay otros factores muy determinantes que podemos tener en cuenta; la movilidad sostenible. Resulta necesario apostar por medios de transporte compartidos, así como por vehículos eléctricos (automóviles, trenes, coches, camiones, autobuses, bicicletas, patinetes…).

Una persona circula con un patinete eléctrico por Bilbao. En la imagen una persona circula con un patinete electrico por Bilbao

En definitiva, la sensibilización sobre energía también es fundamental para fomentar la adopción de tecnologías limpias y renovables. A medida que la energía solar, eólica y otras formas de energía renovable se vuelven más accesibles y asequibles para la población, es importante educar al público sobre sus beneficios y fomentar su adopción en lugar de las fuentes de energía tradicionales y contaminantes.