La Diputación de Gipuzkoa ha elevado de los 400.000 euros previstos inicialmente a 1,1 millones las ayudas al sector ganadero de Gipuzkoa para paliar el daño que la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) ha causado al vacuno.

El ente foral ha explicado que el número de peticiones recibidas “ha superado ampliamente” el montante asignado a esta convocatoria, por lo que el Consejo de Gobierno del pasado 19 de diciembre aprobó un gasto adicional de 710.000 euros para este fin.

Esta medida nos va a permitir atender todas las solicitudes que hemos recibido y reafirma nuestro compromiso con las personas que se dedican a esta actividad, que consideramos fundamental para el presente y el futuro de Gipuzkoa, así como para nuestro equilibrio económico, social, territorial y medioambiental”, ha destacado la diputada general, Eider Mendoza, durante la visita que ha realizado este miércoles al caserío Larrola de Larraul junto al diputado de Equilibrio Territorial Verde, Xabier Arruti.

“Daños económicos importantes”

Ambos han mantenido un encuentro con Jon Tejeria y Eider Arozena, quienes gestionan una explotación de vacuno de leche afectada por la enfermedad y a los que Mendoza ha trasladado “todo el apoyo y la cercanía de la Diputación”, que ha hecho extensivo “al conjunto del sector ganadero”.

Los daños económicos han sido importantes, pero no debemos olvidar que detrás de actividad hay muchas personas que, además de la preocupación por el aspecto económico, habéis sufrido un gran desgaste anímico y emocional, al ver a vuestros animales padecer el impacto de la enfermedad. Os vamos a seguir apoyando y estando a vuestro lado”, ha asegurado.

900 explotaciones ganaderas afectadas

La convocatoria consta de dos líneas compensatorias, una por la muerte de los animales, que servirá para compensar la pérdida de más de 600 reses, y otra por las repercusiones o secuelas en el estado productivo y/o reproductivo de estos más de 3.000 animales que han sufrido repercusiones en su estado de salud tras pasar la enfermedad.

Se calcula que más de 900 explotaciones ganaderas han padecido la consecuencias de la propagación del virus de la EHE, desde que el pasado 5 de septiembre se detectara por primera vez la enfermedad en Gipuzkoa.

Aunque en las últimas semanas apenas se han registrado casos y no ha habido ninguna muerte, el ente foral no baja la guardia. “En todo caso seguiremos vigilantes y manteniendo todas las cautelas por si hubiera nuevos brotes”, ha señalado por su parte el diputado de Equilibrio Territorial Verde.