La Formación Profesional en Euskadi vive su mejor momento. Así lo demuestran los datos de matriculación, que en este curso 2022-2023 han alcanzado máximos históricos, con más de 45.000 estudiantes en los centros de Araba, Gipuzkoa y Bizkaia. Julen Elgeta, presidente de HETEL, la asociación de centros de Formación Profesional de Euskadi, apunta que desde la crisis de 2008 la demanda de este tipo de ciclos ha ido aumentando año a año. 

No quiere decir con ello que sea este un ámbito carente de retos, puesto que de cara al futuro próximo, son diversos los objetivos que se plantean. Por un lado, se prevé que para el año 2030 se jubilen alrededor del 25% de los trabajadores. Es decir, en menos de siete años harán falta unas 250.000 personas formadas para suplir estas bajas, sumado todo ello al crecimiento de las empresas. “La FP está creciendo mucho, pero incluso a día de hoy todavía no somos capaces de cubrir las necesidades de las empresas, por lo que tenemos que seguir trabajando para lograrlo”, explica Elgeta.

“Uno de nuestros retos es conseguir comunicar mejor lo que hacemos, para que llegue a los jóvenes y a la sociedad en su conjunto”

Con dicho objetivo se van a aumentar el próximo curso tanto el número de plazas, como de ciclos y cursos de especialización, si bien el presidente de HETEL es consciente de que a día de hoy resulta complicado cubrir determinadas formaciones por falta de demanda por parte de los estudiantes. Es algo que sucede, por ejemplo, en el sector de la construcción y en otras ramas vinculadas, como la fontanería o la electricidad, en los que existe una carencia de personal cualificado, pero por los que los jóvenes no muestran especial interés. Para vencer esa barrera, Elgeta reconoce que uno de los principales retos de la asociación y de la FP en general es el de mejorar la comunicación y la información. “Se hacen muchas cosas en la FP en Euskadi, pero a veces nos falta saber llegar a los jóvenes y a la sociedad en su conjunto, lograr dar a conocer esas iniciativas”. 

“Las formaciones vinculadas a la industria tienen mucho arraigo, constituyen un valor seguro”

Sin embargo, también existen muchas otras familias profesionales cuyas plazas se cubren siempre. “Las formaciones vinculadas a la industria tienen mucho arraigo y demanda, son un valor seguro”, explica, haciendo referencia a ciclos relacionados con la fabricación mecánica, la electrónica, la automoción o el mantenimiento. Y aunque hoy en día esos perfiles se están complejizando, puesto que las nuevas tecnologías requieren de formaciones específicas, se han ido desarrollando nuevos ciclos y cursos de especialización con el objetivo de formar a los futuros profesionales en esas competencias. Por ejemplo, el curso que viene se ofertarán nuevos cursos de especialización en torno a la robótica, el 5G y la mecatrónica, entre otros.

Respecto a la tasa de inserción laboral, Elgeta asegura que esta es muy alta. “Además, la respuesta en Gipuzkoa suele ser la mejor de los tres territorios y se mueve siempre por encima del 85% a los seis meses de terminar los estudios, si bien hay familias en las que es del 100%”. En este sentido cuenta que aquellos sectores en los que a día de hoy existe una mayor demanda de trabajadores cualificados son, además del industrial, el de la Informática y la Administración y Finanzas. 

De cara al futuro, señala que el desafío y objetivo principal de la Formación Profesional es seguir creciendo. “No podemos parar, porque Euskadi necesita chicos y chicas en FP. Para crecer tenemos que buscar nuevos formatos, seguir comunicando y ser cada vez mejores”. Ahora que comienza el periodo de prematriculación y de puertas abiertas, el presidente de HETEL anima a los jóvenes a acercarse a los centros para conocerlos. “En Gipuzkoa hay muchísima oferta educativa y seguro que hay ciclos que encajan con sus gustos”. Además, resalta el hecho de que “estudiar FP no cierra ninguna puerta”, y recuerda que “mucha gente realiza un grado medio y después pasa a uno superior, o hace uno superior y más tarde va a la universidad”.

Iniciativas para vencer la brecha de género

La brecha entre hombres y mujeres en la Formación Profesional se hace patente en los ciclos científico-tecnológicos, en los que el 86% de los alumnos son hombres. “El ámbito industrial es apasionante y de lo mejor en cuanto a remuneración y condiciones laborales, pero nos cuesta mucho atraer a las chicas, no logramos dar con la tecla”, explica Elgeta. El presidente de HETEL lo achaca, en cierta medida, a los estereotipos o prejuicios sociales, y también a la desinformación, que se produce incluso en los hogares. Por eso considera que “entre todo tenemos que tratar de vencer esos prejuicios y hacer hincapié en lo contrario, en que en Euskadi tenemos mucha industria y servicios avanzados y que existe un mundo con futuro, bien remunerado, también para las mujeres”. Con dicho objetivo, la Asociación lleva a cabo diversas iniciativas, como la plataforma ‘NeskUp’, que persigue promover la igualdad de género en el mundo de la tecnología, la programación y el arte.