Donostia – Los alcaldes de Irun, Baiona y Burdeos han realizado un llamamiento conjunto para que se acometa “la modernización urgente” de la línea ferroviaria que conecta las tres localidades como alternativa “pragmática” a la inexistencia de un proyecto de alta velocidad “del lado francés”.

Los tres regidores, José Antonio Santano (Irun), Jean-René Etchegaray (Baiona) y Pierre Hurmic (Burdeos) han firmado un texto, hecho público ayer, que se fraguó tras la reunión que los tres mandatarios celebraron el pasado 17 de diciembre en Irun para “recordar la importancia histórica de las relaciones entre sus ciudades, sus territorios vecinos y sus habitantes”.

El Consistorio irundarra dio a conocer ayer el contenido de este acuerdo, en el que recuerdan que en Euskadi las previsiones sitúan la llegada de la Y vasca a la muga en 2027, “sin perspectivas de conexión, de momento, con una línea al lado francés”.

Los tres alcaldes expresan “su preocupación común” y lamentan esta situación, “más si cabe, teniendo en cuenta que en Irun ya se ha puesto en marcha la nueva estación internacional de Adif dentro de la transformación urbana del proyecto Vía Irun”.

“En el lado francés, hasta la fecha, el llamado proyecto LGV/GPSO, presentado como única alternativa, es poco creíble, ya que la conexión con la frontera no está prevista a corto plazo ni de forma financiable. En Iparralde, el informe oficial del Consejo de Orientación de Infraestructuras del 12 de diciembre de 2022 prevé una conexión Dax-Irun en 2042 como muy pronto”, lamentan.

Sin embargo, consideran que “ante la urgencia de conectar ambos territorios”, existe la alternativa de “la modernización de la línea existente entre la frontera y Burdeos”. “Es una solución pragmática, al mismo tiempo que menos costosa, más sostenible, más rápida de lograr y más respetuosa con los territorios y los ecosistemas. Estudios previos avalan esta alternativa”, subrayan.

Por ello, consideran necesario que, “cuanto antes” y para “poder confirmar esta alternativa”, se realice “un estudio complementario por parte de una empresa independiente que analice los calendarios, las posibilidades de transporte intermodal, la viabilidad técnica, los tiempos de viaje previstos”, así como sus costes e impactos ambientales.

Destacan asimismo “el papel central de los alcaldes y las ciudades en la construcción colectiva de su territorio”, por lo que hacen un llamamiento “a todas las fuerzas políticas, económicas, sociales y ciudadanas a apoyar esta alternativa, símbolo de una movilidad eficiente y sostenible”.