Gipuzkoa, con un incremento del 20%, registra el mayor crecimiento porcentual en la CAV de agresiones hacia las mujeres. El territorio suma en lo que va de año un total de 1.201 víctimas de violencia, cuando en 2021 se contabilizaron 1.021.
De enero a septiembre de este año se ha atendido a 835 personas agredidas por su pareja o expareja, muy por encima de las 674 contabilizadas el año pasado, según los datos facilitados por el Departamento vasco de Seguridad. Se trata del capítulo que registra el mayor número de denuncias, un total de 1.087, lo que supone un incremento del 26% con respecto al año pasado.
De ellas, la mayoría son malos tratos habituales físicos (296 casos) vejaciones y lesiones (67 casos), seguido de los delitos contra la libertad como amenazas, coacciones, o acoso.
Hay otras formas de violencia contra la mujer. La intrafamiliar (que exceptúa la ejercida por la pareja o expareja), también ha experimentado un notable crecimiento: de los 225 episodios atendidos en 2021 a los 245 de este año, con un aumento del 8,89%. El número de víctimas de delitos contra la libertad sexual se mantiene en parámetros similares a los del año pasado, con 121 casos.
De este modo asciende en Gipuzkoa a 1.518 el número de delitos en las diferentes formas de violencia contra la mujer ejercida por parte de la pareja o expareja, en el seno del hogar o contra su libertad sexual. Comparando con el mismo periodo del año anterior, este tipo de delitos han crecido un 20%, puesto que el año pasado se registraron 1.255.
Diferentes formas de violencia
Se trata de un crecimiento muy superior a la media de Euskadi, que se sitúa en torno al 14,6%. En concreto, entre enero y septiembre de 2022 se han contabilizado en la CAV un total de 4.591 delitos en las diferentes formas de violencia contra la mujer. Durante ese periodo, la Ertzaintza ha registrado 3.696 víctimas, lo que supone un crecimiento del 13,2% respecto al mismo periodo de 2021.
En lo que va de año no se han contabilizado homicidios en Euskadi con autoría de la pareja o expareja, aunque sí constan cuatro intentos (misma cifra que en 2021) calificados en grado de tentativa. En cambio, sí se ha registrado un homicidio consumado y una tentativa más dentro del hogar, en un caso de violencia intrafamiliar.
“Para alcanzar mayor protección y facilitar los trámites judiciales, en los casos más graves se ofrece a la mujer maltratada el acompañamiento de agentes al juzgado para los primeros trámites judiciales”, según explican fuentes del Departamento de Seguridad. Cada vez que se detecta un nuevo caso, la Ertzaintza lo registra es un expediente informático. A partir de ese momento, con independencia del nivel de riesgo asociado a la víctima, la Ertzaintza pasa a prestar protección activa.
Cada expediente aglutina cronológicamente todo el historial del caso, en el que se incluyen entrevistas, denuncias y órdenes judiciales. Un total de 50 mujeres cuentan actualmente con un servicio de escolta permanente o puntual, nueve de ellas en Gipuzkoa, 37 en Bizkaia y cuatro en Araba.
