Gipuzkoa quiere “marcar la diferencia” con su estrategia para fomentar el envejecimiento saludable, denominada Adinberri, a la que se ha sumado el Gobierno Vasco con un apoyo económico de 2,9 millones de euros que permitirá poner en marcha un programa piloto de “teleasistencia predictiva” y un Observatorio de Inteligencia Avanzada.

Esa colaboración se ha materializado en un convenio de colaboración que suscribieron ayer la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Beatriz Artolazabal, y la diputada foral de Políticas Sociales, Maite Peña, en Pasaia, donde la Diputación de Gipuzkoa construirá el “centro de referencia del proyecto”.

El plan foral es desarrollar un nuevo modelo de cuidados para que las personas mayores envejezcan en su entorno manteniendo unos hábitos saludables, para lo que se trabajará en una “intervención personalizada” en ámbitos como el de la alimentación, la actividad física, la estimulación cognitiva y las relaciones sociales y comunitarias.

La prevención, incluida la de la soledad no deseada, es un pilar de esta iniciativa para generar un “ecosistema local de cuidados”, un objetivo que comparte el Gobierno Vasco, que va a “reforzar” este programa con 2.950.325 euros procedentes de fondos de la Unión Europea.

Su destino no será el centro Adinberri, que comenzará a construirse en Trintxerpe a finales de este año y se ha licitado en 59 millones de euros. Se empleará en el “despliegue” de este modelo innovador de cuidados, que prevé la puesta en marcha de la iniciativa HerriLab, que será el paraguas bajo el que se pilote la “teleasistencia predictiva” mediante el uso de las nuevas tecnología.

Se aplicarán y experimentarán nuevos dispositivos, como sensores instalados en frigoríficos y sofás para saber si, por ejemplo, una persona lleva sentada demasiadas horas sin moverse o no ha abierto su nevera cuando debería haberlo hecho determinadas veces. Son dispositivos asociados a hábitos de vida con los que se busca “adelantarse” a las necesidades de los usuarios.

El acuerdo firmado ayer establece además la creación de un Observatorio de Inteligencia Avanzada como parte del primer polo europeo transfronterizo de innovación en la eurorregión Nueva Aquitania-Navarra-Euskadi, a través del cual se apoyarán experiencias en Oarsoaldea, que tras su evaluación se decidirá si se extienden al conjunto del País Vasco.

El edificio, que se levantará junto al muelle del Hospitalillo, dispondrá de una residencia para personas mayores con 124 plazas y una extensión de 13.090 metros cuadrados, un centro de día, 18 apartamentos tutelados con 22 plazas, además de un espacio de 680 metros cuadrados destinado a la unidad de innovación de Adinberri.