Donostia- La Diputación Foral de Gipuzkoa ha abierto un centro de día con 18 plazas para adolescentes tutelados, un innovador recurso en el que los menores, con problemas de comportamiento, convivencia e integración, van a dormir al domicilio familiar y siguen un programa terapéutico individualizado.
El nuevo centro, ubicado en un local anexo de la iglesia de Iesu de Riberas de Loiola, en San Sebastián, ha sido visitado este jueves por el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y la titular el departamento de Políticas Sociales, Maite Peña.
Según informa la institución foral en un comunicado, Olano ha asegurado que se trata de un espacio "pionero" en España, porque sí existen centros de día para atender a menores con diversos problemas y necesidades pero cuya tutela pertenece a sus padres o familiares.
El centro ubicado en Riberas de Loiola consta de 18 plazas, está dirigido a menores de 13 a 17 tutelados por la Diputación y ofrece opciones terapéuticas distintas al resto de dispositivos residenciales, entre ellos, la posibilidad de irse a casa a pasar la noche.
La metodología y el tipo de intervención se ajusta además a las necesidades de las personas atendidas y también a la nueva legislación de atención y protección a menores, que prioriza las medidas que eviten la separación de la familia de origen.
De esta manera, el nuevo recurso ofrece "una atención terapéutica comunitaria, diferente a la atención clásica" que se presta en las residencias o espacios psicológicos convencionales, ha explicado Olano, quien ha agregado que introduce "el concepto de 'mejoría'" dentro de un programa de "reducción de riesgos".
Los profesionales del centro trabajan con los adolescentes evitando dinámicas o medidas coercitivas y apostando por "la contención emocional y la confianza", y llevan a cavo acciones de apoyo dirigidas a mejorar la autonomía personal, las formas de relación con sus familias y la integración en la comunidad.
En el centro, los adolescentes disponen además de una atención tutorial individualizada con servicios de orientación, acompañamiento y apoyo psicológico, al tiempo que las familias reciben orientación socio-laboral y servicio de ocio y tiempo libre.
Según los datos aportados por el departamento foral de Política Social, en Gipuzkoa hay actualmente en torno a 700 menores bajo la tutela de la Diputación, de los que aproximadamente la mitad vive con familias de acogida y el resto en distintos centros de la red foral.
Durante 2018, se han incorporado 107 nuevas plazas, entre ampliaciones y nuevos centros.