Este invierno, y se calcula que durante muchos meses más, aunque la fecha está por determinar, no habrá Dalsy en las farmacias. No al menos el de concentración de 20 mg/ml, el de sabor a naranja al que tantos padres y madres han recurrido para combatir la fiebre y las molestias de los más pequeños.

Igor Odriozola, de la farmacia Odriozola de Beasain, explica que hay otros medicamentos con similar principio activo, prevaleciendo el Ibuprofeno, pero que es este el más demandado “porque es el que tiene el gusto más conseguido, un sabor a naranja que es el que los niños aceptan mejor”.

Es un medicamento que, principalmente, se utiliza para atajar la fiebre y para lograr este fin existen también otros productos de distintas marcas. Incluso sigue en el mercado el Dalsy con mayor concentración, 40mg/ml, que se acostumbra a dar “aunque sea en menor cantidad”.

Esta concentración, habitualmente, no es aconsejable para los niños más pequeños y se suele recetar para los de más edad.

Pero además del Dalsy, también se pueden prescribir genéricos o “medicamentos con la misma composición”.

Pese a todo, el Dalsy naranja se sigue pidiendo, al menos en la farmacia Odriozola, aunque se acepten otros productos como mal menor. “Algunos padres y madres nos dicen que les cuesta que sus hijos tomen otros medicamentos”, aunque finalmente de una forma u otra se consiga que los acepten.

El desabastecimiento, explica Odriozola, comenzó hace ya unos meses. “No es porque el medicamento esté mal, ha existido un problema con el prospecto y el laboratorio lo ha retirado. Como la demanda es tan alta, será difícil retornar a la normalidad y que el laboratorio pueda producir tanta cantidad en un breve plazo de tiempo”, indica.

Lierni Mendiaraz, de la farmacia Mendiaraz de Donostia, ha visto cómo la gente, poco a poco, ha ido olvidándose de este popular medicamento. Y no es para menos ya que, recuerda, el desabastecimiento comenzó el mes de febrero.

“Cada vez más gente nos pide los genéricos”, asegura esta farmacéutica, que también incide en que el sabor del Dalsy hace que sea mejor aceptado por los niños y, por eso, era tan demandado.

“En realidad no hay mayor problema, porque hay otras opciones. Después de seis meses preguntando ya se han cansado”, explica Mendiaraz.

Según les consta, el fallo en el prospecto que se ha argumentado para la retirada de miles de unidades de Dalsy no llegó a tener afecciones en el Estado, pese a lo que se dejó de abastecer a las farmacias. Con el invierno por delante, la época en la que los catarros y los episodios de fiebre entre los más pequeños proliferan, se verá si realmente el público echa de menos el Dalsy naranja o, efectivamente, este medicamento va cayendo lentamente en el olvido.

También queda por ver si finalmente la fecha para que vuelva al mercado que se ha venido barajando, junio de 2019, se puede llegar a cumplir o todavía habrá que esperar más.