La marmota Phil predice seis semanas más de invierno
Ayer hizo su predicción el animal meteorólogo más famoso del mundo
Washington. La marmota Phil, el animal meteorólogo más famoso del mundo, predijo ayer seis semanas más de invierno en Estados Unidos ante la mirada atenta de los numerosos seguidores que ha conseguido en 131 años de tradición. Como cada 2 de febrero desde 1887, los vecinos de Punxsutawney (Pensilvania) subieron a la pequeña colina de Gobbler s Knob para conocer el pronóstico de su residente más ilustre. Phil vio su sombra al salir de la madriguera lo que, según la leyenda popular, significa que el invierno se alargará aún seis semanas más.
El presidente de la ceremonia, que tuvo que lidiar con un Phil más rebelde que de costumbre, pidió "perdón" por la mala noticia a las decenas de miles de personas que aguardaban el pronóstico en un ambiente festivo, pese al frío y la predicción de nieve. A los maestros de ceremonia les costó sacar a Phil después de que el presidente tocara, como es costumbre, tres veces con su bastón en su madriguera.
Tras insistirle, le contó al presidente en "marmotense", un idioma que solo entienden Phil y su círculo íntimo, que había visto su sombra. La marmota de Pensilvania es experta en dar malas noticias: predijo un invierno largo 102 veces, una primavera temprana solo 18 y de 10 años no hay registros.
"No me sorprende el pronóstico, habría sido la primera vez que Phil predijera dos años seguidos una primavera anticipada", explica Bill Cooper, uno de los maestros de ceremonias y expresidente del llamado Círculo Íntimo del Club de la Marmota. A Cooper, que trabaja desde hace 28 años en preservar esta tradición, no le gusta que le pregunten ni por cuántos Phil ha habido en los 131 años ni por la fiabilidad de los pronósticos.
Las marmotas viven unos seis años, pero la versión oficial del club es que solo ha habido un Phil desde el inicio de la tradición: su longevidad se debe a que cada verano toma un ponche mágico que le da siete años más de vida. Según las agencias meteorológicas de EEUU y Canadá, estos roedores aciertan en sus pronósticos menos del 40% y Phil no es una excepción: los datos analizados de los últimos años "no muestran una habilidad para predecir".
"Si nos ponemos a hablar de ciencia, nos perdemos lo importante del día. Se trata de divertirse, divertirse por el mero hecho de divertirse", zanja Cooper al respecto. Esa diversión es, en su opinión, "el secreto" de que la tradición no solo haya sobrevivido más de un siglo, sino que además se haya podido adaptar a los nuevos tiempos: ahora la ceremonia puede seguirse en directo en la web del club desde cualquier lugar del mundo.
Cooper, ataviado con la chistera y frac clásicos del Círculo Íntimo de Phil, ha hecho estos días de embajador de una pareja de alemanes que viajaron desde Berlín hasta el pequeño pueblo del oeste de Pensilvania solo para vivir en primera persona la fiesta de la marmota más antigua de Estados Unidos.