Donostia. La televisión nos bombardea con las supuestas infidelidades de Iñaki Urdangarin a la infanta Cristina tras la divulgación de más correos electrónicos de Diego Torres. La prensa seria difunde con profusión los escarceos amorosos del rey con Corinna zu Sayn-Wittgenstein y las encuestas revelan que más de la mitad de la población se declara infiel. Sin embargo, Internet y las redes sociales han introducido posibilidades inéditas de ser adúlteros y mantener citas clandestinas. La eclosión en los últimos tiempos de portales de contacto como Ashley Madison o Victoria Milan, facilitan los romances, desinhiben y permiten pasar del secreto virtual a la realidad.
La agencia de contactos para casados Ashley Madison, la segunda red con mayor crecimiento después de Facebook, que cuenta con más de 16 millones de usuarios en todo el mundo, acaba de perder una demanda porque utilizó como imagen de una campaña publicitaria a la reina Sofía. Su director en España, Cristoph Kraemer, asegura que el retrato robot del infiel es el de un hombre con una edad entre los 30 y los 45 años, aunque cada vez hay más mujeres directivas y profesionales. "Hay muchas madres solteras o chicas con perfiles profesionales que han enfocado su vida al trabajo y que acuden a este tipo de servicios", subraya.
Kraemer afirma que la existencia de una web como la suya ofrece al usuario un servicio anónimo y discreto. De hecho, se jacta de que los españoles están entre los campeones mundiales de la infidelidad. Las cifras avalan esta leyenda urbana; la plataforma cuenta con 800.000 usuarios en España y ha superado los 2,5 millones de facturación el pasado año. "En España sigue habiendo una doble moral sobre el negocio de la infidelidad. Nos cerraron muchas vías tradicionales para anunciarnos, como la televisión, y tuvimos que buscar otras fórmulas como vallas y lonas promocionales en edificios emblemáticos", declara Kraemer.
Estas plataformas defienden que lo suyo es un negocio como cualquier otro y mantienen que solo ponen negro sobre blanco la realidad de la infidelidad. De hecho, Victoria Milan, otra de las webs especializadas en aventuras extramatrimoniales, acaba de hacer pública una encuesta entre sus 350.000 usuarios, para averiguar qué consideran que sería lo peor que les podría hacer su pareja. Para ambos sexos, poner los cuernos, un tabú hasta ahora de manual, ya no es uno de los principales problemas dentro de las parejas actuales. Y citan como ejemplo, cómo ha salido fortalecido el matrimonio de los Duques de Palma.
Un 30% de los encuestados coincide en que lo peor que les puede pasar dentro de su pareja es "ser objeto de menosprecio constante". "Ser menospreciado por la persona a la que queremos es una experiencia muy desagradable, uno se puede llegar a sentir el centro de toda la culpa y avergonzarse de si mismo", afirman. En segundo lugar para las usuarias de Victoriamilan.es, lo peor que podría hacer su pareja es "beber en exceso o drogarse" (22%) y en tercer lugar "ser agresivo o violento". Para el género masculino, lo segundo peor que les podría hacer su pareja es ser una "celosa compulsiva" (28%) y lo tercero coincide con el resaltado por las chicas.
Alicia Gallotti, autora del libro Soy infiel, ¿y tú?, y portavoz de Victoriamilan.es, es categórica al afirmar que estos portales no crean la infidelidad, sino que canalizan una demanda ya existente. "En los negocios nunca se crea un mercado desde cero. La infidelidad ha existido siempre, solo que antes se ocultaba. Por eso, estos sitios web se dirigen a aquellas personas que antes frecuentaban servicios como las páginas de contactos", mantiene.
Gallotti no cree que uno vaya a convertirse en una persona infiel simplemente por apuntarse a estos portales. "Nuestros clientes ya tenían una predisposición hacia el adulterio porque la traición es una decisión personal". Para Gallotti, una encuesta de esta página constata que el 45% de las personas que acceden a las citas virtuales son mujeres de entre los 25 y los 60 años y que el 25% de ellas solo chatea, sin llegar a establecer ningún contacto. En el mundo real, una encuesta de la Universidad de Florencia especifica que el 58% de las mujeres confiesa haber sido infiel al menos una vez en su vida, el 65% haber tenido una aventura de una noche y el 10% haber simultaneado la relación del marido con el amante.
Mario Luna, coautor de Ligar es fácil si sabes cómo, advierte de que "Internet es un apoyo, pero nunca debe ser sustituto del mundo real. Yo siempre recomiendo al que busca pareja que no se limite solo a un canal, sino que salga a la calle. Internet es una excelente herramienta para seleccionar, descartar lo que no nos gusta y para acceder a ambientes o situaciones que si las dejásemos al azar nos llevarían años", incide.