En el mundo empresarial y financiero, el pez grande siempre se come al chico. Así es y ha sido desde que se inventó el capitalismo. No es el empresarial un sector con margen para el sentimentalismo. Ni para el patriotismo. El Banco Sabadell engulló (“¡es la economía, estúpido!”) en el 2012 al Banco Guipuzcoano, nuestro centenario banco con sede en Donostia y fuerte presencia en el resto de territorios vascos. El Sabadell, que fue tiburón en 2012, se ha topado ahora con un tiburón más grande que amenaza su supervivencia.

¡Envía tu carta!

Si quieres enviar tu Carta al Director, no puede exceder las 30 líneas y debe ir firmada. Debe adjuntarse fotocopia del DNI del remitente y número de teléfono. NOTICIAS DE GIPUZKOA se reserva el derecho de publicarlos, así como el de resumirlos y extractarlos. La dirección de envío es cartas@noticiasdegipuzkoa.eus


No nos conmueven las actuales lágrimas del tiburón que se siente amenazado. Llama la atención, eso sí, la poca defensa que hicieron nuestras instituciones en 2012 para evitar la desaparición del Guipuzcoano, en contraste con la apasionada defensa que están haciendo los partidos independentistas catalanes del Sabadell. Un tiburón ahora convertido en presa.