Asestan dos puñaladas mortales a un oñatiarra que residía en Panamá
la muerte de mikel Illarramendi apunta a un suceso de delincuencia común Los investigadores se muestran sorprendidos por la violencia empleada contra este antiguo miembro de ETA
donostia. Un oñatiarra, antiguo miembro de la organización armada ETA que residía en Panamá desde hace años, fue asesinado el pasado sábado en una zona rural del este del país, según informaron ayer fuentes próximas a la investigación.
Se trata de Ion Mikel Illarramendi Zabaleta, quien residía en La Higuera, en el distrito de Chepo, unos 100 kilómetros al este de la ciudad de Panamá, donde aparentemente se dedicaba a la pesca.
El antiguo miembro de ETA, que estuvo preso en Francia condenado por pertenecer al aparato logístico de la organización armada, murió de dos puñaladas, mientras que otras dos personas que estaban con él la madrugada del sábado, fueron víctimas de fuertes palizas. Todo apunta a que se trata de un suceso de delincuencia común, ya que el guipuzcoano "movía bastante dinero en efectivo" y los atacantes se lo llevaron todo, así como el resto de sus pertenencias, dijeron las fuentes.
tres botes pesqueros Medios panameños publicaron que Illarramendi, de 46 años, poseía tres botes pesqueros y desde hacía apenas un año había alquilado en ese sector un lugar donde además de vivir, tenía el taller para sus embarcaciones. Los investigadores se mostraron sorprendidos por "la violencia que emplearon" los agresores para robarle.
Según las fuentes, una línea de indagación contempla que el oñatiarra pudiera estar vinculado a personas o actividades relacionadas con la delincuencia común.
En cuanto a los dos acompañantes de Illarramendi, ambos indígenas y que fueron atados y amordazados, uno está hospitalizado en estado grave con golpes en la cabeza y el otro se encuentra fuera de peligro.
Illarramendi llevaba tiempo residiendo legalmente en Panamá y actualmente tramitaba su residencia permanente en el país.
El embajador de España, Jesús Silva Fernández, declaró que ha estado en permanente contacto con las autoridades panameñas para aclarar el caso y que se está prestando ayuda consular a la viuda y demás familiares de Illarramendi, en el Estado, para cumplir los trámites de repatriación del cadáver.
Mikel Illarramendi fue detenido en Francia en 2003 y cumplió una condena de diez años de cárcel en ese país tras ser juzgado por pertenecer al aparato logístico de la organización terrorista.
Illarramendi era natural de la localidad de Oñati. Tras salir de prisión, hace dos años, residió en Eskoriatza, antes de trasladarse a vivir a Panamá.