Sartaguda se vuelca con el euskera

sartaguda. La localidad de Sartaguda, en la Ribera Alta, vivió ayer una jornada festiva con motivo de la celebración del 25º aniversario de su primera ikastola. A pesar de la lluvia y el intenso frío, cientos de personas acudieron al municipio a pasar el día desde primera hora de la mañana. Los autobuses y los coches se amontonaban en la entrada del municipio, que se volcó para que todo saliera a la perfección. Lo que en un primer momento se ideó como una fiesta familiar, acabó convirtiéndose en una gran cita. La difícil situación que atraviesa en estos momentos Ibaialde Ikastola de Lodosa obligó a los organizadores a crear una jornada en pro del euskera y cuyos beneficios ayuden a salir adelante al centro.

El acto principal del día tuvo lugar a las 11.00 horas en el número 15 de la calle del Olmo, lugar en el que hace un cuarto de siglo abrió sus puertas la primera ikastola. Precisamente en la fachada de la vivienda se destapó una placa conmemorativa en la que se puede leer, en euskera y castellano: Aquí se fundó hace 25 años la ikastola de Sartaguda. Mediante esta placa queremos agradecer y reconocer el trabajo de aquellas personas que impulsaron el euskera en este pueblo. Sartaguda 1986-2012.

Acto seguido, la presidenta de Ibaialde, Ana Mendizabal, agradeció la asistencia de tanta gente y destacó a Íñigo Tellería, actual director de la ikastola, y que pese a la gravedad de la actual situación continúa trabajando con ganas, ilusión y motivación. En este acto de recuerdo también se homenajeó a Mari Paz Iturbe, primera profesora de la ikastola, implicada con el proyecto desde el minuto uno, y gracias a la cual el centro educativo salió adelante.

El sartagudés Óscar Martínez también recibió una placa por su "ayuda incondicional desde el primer día". El vecino de la localidad ribera agradeció a todos aquellos que hicieron posible que la ikastola se creara en Sartaguda y aseguró que, a pesar de las dificultades a las que tienen que hacer frente actualmente desde Ibaialde Ikastola, el futuro traerá sueño e ilusiones renovadas. Martínez terminó su intervención con un pequeño poema titulado 1986, una Ikastola en Sartaguda: "Sartaguda, tierra regada por sudor y lágrimas donde las ilusiones saltan de sus huesos a su piel, corren por las calles, te abrazan al volver la esquina, miran desde las ventanas y trepan por tu espalda (?) Una Ikastola en Sartaguda, ¿y por qué no?".

En este acto, Luis Miguel Martínez, primer presidente del centro, también recibió un sentido homenaje. "Si nos ponemos a enumerar a todos los que ayudaron para que la ikastola saliera adelante, seguro que nos dejaríamos a gente. Esta placa la recojo yo en representación de todos los padres que impulsaron el proyecto. No sólo de los pioneros, también en nombre de los que han venido después y de los que vendrán, los profesores y los presidentes. Esto es un símbolo de lucha. Voy a guardar la placa en casa con muchísima satisfacción, pero también es de los vecinos de este barrio. De Esther, que les daba chocolate a los chavales, del de la casa de enfrente que les llevaba al corral para que vieran los conejos, etc. Todo era así, muy familiar y bonito. Hoy las cosas son mas duras, pero no por eso dejan de ser ilusionantes. E s cierto que el euskera en esta zona va a contracorriente, pero si todos ayudamos y colaboramos nadando a la vez, cuantos más brazos seamos, mejor."

Los últimos homenajeados fueron los cinco primeros alumnos; Lara Burgos, Gema Martínez, Aritz González, Iker Martínez y Beatriz Martínez. Los jóvenes, que no pudieron aguantar las lágrimas, aseguraron sentirse muy orgullosos, aunque dejaron claro que este reconocimiento era para sus padres, sobre todo para los que ya no están; Ricardo González, Javier Martínez y Javier Martínez (Picán). Los cinco, que llevaban varios años sin coincidir, se fueron a comer juntos para recordar aquellos años de ikastola.