Donostia. El enfrentamiento entre el director del Museo Vasco del Ferrocarril, Juan José Olaizola, y los máximos responsables de EuskoTren, encabezada por el consejero y el viceconsejero de Transportes del Gobierno Vasco, Iñaki Arriola y Ernesto Gasco, respectivamente, ha subido un nuevo peldaño. EuskoTren ha abierto dos expedientes a Olaizola por declaraciones y actuaciones que, a juicio de la compañía ferroviaria, son "susceptibles de constituir falta".
Este nuevo capítulo de las desavenencias entre Olaizola y los mandatarios de EuskoTren hunde sus raíces a finales del pasado año, cuando se decidió la destitución de su cargo tras más de veinte años al frente y su traslado a Bilbao como responsable de formación. En ese momento, personas aficionadas a la historia del ferrocarril alzaron su voz en contra de esta determinación, encabezadas por la Asociación de Amigos del museo.
El Gobierno Vasco dio marcha atrás y lo confirmó en su cargo. Pero ya este año se abrió un concurso para elegir un nuevo director y fue seleccionada para el cargo Maitane Ostolaza, doctora en Historia y Civilización en la Universidad de La Sorbona, en París.
prestigio El cruce de acusaciones dio ayer un nuevo giro al conocerse la apertura de un primer expediente a Olaizola argumentado en que sus actuaciones han excedido "los límites de la libertad de expresión, han causado un grave daño a la imagen pública, la dignidad y al prestigio profesional de las personas aludidas, así como a la imagen y prestigio de la propia Sociedad Pública EuskoTren y de la Fundación del Museo".
Las declaraciones por las que se le abre expediente se difundieron en NOTICIAS DE GIPUZKOA -si bien el pliego de cargos lo cita erróneamente como Diario de Noticias (sic)- en una entrevista, en la que manifestó que tiene "la sensación de que quieren" apartarle "de la dirección del museo" y que le quisieron "forzar a ser responsable de formación en EuskoTren". Asimismo, expresó que durante estos meses se ha "sentido acosado" y que Gasco es "el factor determinante desde el principio" de su destitución, porque puede tenerle un "gran rencor" por un "pequeño debate" en un diario.
Además, EuskoTren le acusa en este primer expediente de una posible comunicación a la Asociación de Amigos del Museo Vasco del Ferrocarril de "hechos inciertos a terceros para su difusión que han causado un grave daño a la imagen pública, a la dignidad y al prestigio profesional de las personas aludidas".
En este caso se refiere a un escrito de la Junta Directiva de la Asociación de Amigos del Museo Vasco del Ferrocarril fechado el 10 de septiembre y remitido a "diversas personas y entidades relacionadas" con el Patronato museístico. En ese texto, la Junta manifiesta que, "según expone el propio Juanjo Olaizola, tanto el consejero delegado como el director de EuskoTren le conminaron aceptar el nuevo puesto (responsable de Formación) ya que, según le informaron, se iba a realizar un proceso de selección del director de la Fundación, en el que no iba a tener ninguna posibilidad".
imprudencia El texto también recogía que "los criterios establecidos en el proceso de selección están viciados y orientados a infravalorar los activos de la candidatura de Olaizola".
En el segundo expediente, EuskoTren considera que puede suponer "una imprudencia y una infracción" permitir la entrada a unos niños en la locomotora mientras completaba el trayecto entre Lasao y Azpeitia. Este hecho fue detectado por una fotografía publicada en un periódico guipuzcoano en el mes de agosto.
Por último, EuskoTren considera que se "ha excedido de sus competencias y atribuciones, causando un perjuicio tanto a los clientes como a la propia imagen pública" de la compañía ferroviaria. En este sentido, se refiere a que el 11 de octubre, Olaizola cerró el museo a las 12.00 horas "al objeto de que la dirección de EuskoTren mantuviera una reunión con los trabajadores, que concluyó aproximadamente a las 13.30 horas".
El expediente abunda en que "las reuniones se programaron "en horario de mañana y tarde, de forma que pudiera mantenerse la atención al público y, sin embargo, este horario fue alterado" por Olaizola "sin contar con los organizadores, procediendo al cierre de las instalaciones y recortando el horario de apertura al público".