Educación impulsa un plan de rescate para los jóvenes con baja cualificación

vitoria. La FP pretende ser la herramienta que devuelva "la esperanza" a los jóvenes vascos que actualmente tienen las puertas del empleo cerradas. Así lo cree el Departamento de Educación, que ayer presentó la nueva hoja de ruta que marcará las actuaciones en los próximos cuatro años y que tendrá como objetivo principal el rescate de personas con baja cualificación.

La formación más técnica está demostrando ser de gran utilidad en un momento económico difícil. Las matriculaciones en la FP han crecido un 17% desde que estalló la crisis en 2008, ya que son muchos los que han visto la necesidad de incrementar su preparación o de especializarse para tratar de aspirar a un puesto de trabajo.

Sin embargo, todavía dos de cada diez jóvenes de entre 25 y 29 años tienen un nivel de cualificación bajo, algo que pone en serio peligro su futuro. Se calcula que para el año 2020, en Europa se destruirán más de doce millones de empleos dirigidos a trabajadores sin estudios, y que por el contrario se crearán 15,5 millones de empleos de alta cualificación y otros 3,7 millones de cualificación media.

El plan del Gobierno Vasco contiene una serie de medidas como la acreditación de competencias obtenidas por experiencia laboral, que se desarrollará una vez se apruebe la Ley de Aprendizaje para toda la Vida, una normativa que Educación presentará durante el primer semestre de 2011.

También plantea un mayor apoyo a los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI), cuya finalidad es que el alumnado que ya haya cumplido 16 años y no tenga el graduado en ESO pueda conseguir una cualificación profesional que facilite su acceso al mundo laboral.