Bilbao. La exposición "Cuerpo Humano" aterriza mañana en el Palacio Euskalduna de Bilbao, ¿cuál es su objetivo?

Dar a conocer, de una forma general, cómo esta estructurado el cuerpo humano. Nuestro afán de conocimiento es infinito. Contamos, además, con accesos a diferentes medios que nos pueden informar en cualquier momento. Hoy en día, un paciente que va a la consulta y le diagnostican una prostatitis enseguida se va a Google a mirar qué es eso. Nos mostramos pasivos frente a lo que ocurre alrededor. En ese sentido, uno de los aspectos más interesantes que puede tener una persona para su formación y proyección es conocer el propio cuerpo humano.

¿Está dirigida hacia un público concreto?

No, en absoluto. Está dirigida a aquellas personas que tengan interés o curiosidad por saber cómo estamos construidos, independientemente de la edad. La persona que no tenga conocimientos sobre anatomía va a quedar impresionada en cada muestra. Ese punto de vista es interesante porque eso le va a hacer reflexionar sobre episodios pasados que haya tenido y va a comprender cosas que para ella antes eran algo etéreo o virtual. El que tenga conocimientos previos va a ver una presentación distinta de algunos órganos, desde diferentes perspectivas, con diferentes formas de presentación.

Un total de 200 escolares han mostrado su interés por visitar la exposición, ¿cree que es adecuada para los más pequeños?

Por la experiencia que nosotros tenemos hasta la fecha, los niños cuanto más pequeños son, más se interesan, porque se desconectan de otros prejuicios que los adultos llevan dentro al ver este tipo de exposiciones. Esto es una disección de un cadáver, es decir, la persona ha tenido que morir. Los niños cuanto más lo son, menos noción tienen de la muerte. Pero cuando la edad avanza las personas saben que hay que morirse, puesto que no queda otra. Cuanto mayor seamos, más vamos a relacionar lo que aquí vemos con nuestro problema de que nos vamos a morir. Por lo tanto, los problemas no lo veo en las edades jóvenes. Al contrario.

Los cuerpos y diferentes órganos que se exponen están conservados mediante la "plastinación", ¿en qué consiste está técnica?

En primer lugar, se disecciona la parte que se quiere llevar a cabo. Una vez que se realiza, pasa por un proceso de deshidratación y se incluye un material de resina, parecido a la silicona, para que adquiera rigidez. Después, se le da un poco de coloración para que tenga el aspecto un poco más parecido a la realidad. Si se tratan bien y se manicura correctamente, puede llegar a durar toda la vida. En cualquier caso, hay que tener en cuenta que a nosotros, los anatomistas, lo que nos interesa es conocer la estructura del cuerpo humano vivo, aunque tengamos que utilizar los cadáveres.

¿Qué resultado esperan que tenga la exposición en el público?

Yo creo que hay mucha información para el tiempo que dura. Pero tenemos que tener en cuenta que lo que pretendemos es que las personas que lo vean adquieran una idea general. Aquí, en una hora y media no vamos a poder hablar de anatomía, sino de la repercusión que puede tener el conocimiento académico de órganos, pero no de anatomía.