Desde la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria hacen referencia al medicamento como "una sustancia que cuando la tomamos ejerce una acción en nuestro organismo, también llamado efecto farmacológico, como bajar la tensión arterial, quitarnos el dolor de cabeza, etc. Este efecto es producido por una sustancia activa o principio activo. Por otro lado, el resto de sustancias que contiene un medicamento y que no ejercen ningún efecto se llaman excipientes".
Prevenir, diagnosticar, tratar, aliviar o curar enfermedades o dolencias o para afectar a funciones corporales o al estado mental
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico lo define como "toda sustancia medicinal y sus asociaciones o combinaciones destinadas a su utilización en las personas o en los animales que se presente dotada de propiedades para prevenir, diagnosticar, tratar, aliviar o curar enfermedades o dolencias o para afectar a funciones corporales o al estado mental. También se consideran medicamentos las sustancias medicinales o sus combinaciones que pueden ser administrados a personas o animales con cualquiera de estos fines aunque se ofrezcan sin explícita referencia a ellos.
Tres de los medicamentos más comunes son el ibuprofeno, los antibióticos como claritromicina o azitromicina y el omeprazol. Desde la Clínica Universidad de Navarra (CUN) definen al ibuprofeno como "un fármaco que actúa impidiendo la formación de prostaglandinas en el organismo, ya que inhibe a la enzima ciclooxigenas". El omeprazol, por su parte, "es un medicamento que actúa inhibiendo la bomba de protones. Esta bomba se encuentra en la pared de unas células que recubren el estómago. Estas células usan la bomba de protones para producir el ácido del estómago. El omeprazol actúa disminuyendo la cantidad de ácido que se produce en el estómago", tal y como así lo describen desde la CUN.
Los medicamentos comunes que causan problemas de corazón, según un cardiólogo
"Como cardiólogo, cada semana veo personas con problemas de tensión, retención de líquidos o arritmias… Y muchas veces, la causa no es la genética, ni la edad, ni el estrés: son medicamentos de uso muy común que tomamos sin pensar en sus efectos a largo plazo", comienza planteando el cardiólogo Aurelio Rojas, con nombre de usuario @doctorrojass y que cuenta con más de 100.000 seguidores en TikTok y más de 597.000 seguidores en Instagram, en una de sus publicaciones.
El cardiólogo y creador de contenido explica lo siguiente: "En este vídeo te explico tres de los más habituales: Ibuprofeno y otros AINEs. Pueden elevar la tensión arterial, aumentar el riesgo de insuficiencia cardíaca y dañar el endotelio vascular. ¿Alternativas? Paracetamol para el dolor leve-moderado y fisioterapia o suplementos naturales en dolor crónico. Antibióticos como claritromicina o azitromicina. Alteran el ritmo cardíaco y pueden prolongar el QT, aumentando el riesgo de arritmias peligrosas. Lo importante es usarlos solo cuando están bien indicados, y bajo control médico. Omeprazol y otros inhibidores de la bomba de protones (IBP). Su uso crónico puede reducir la absorción de magnesio y vitamina B12, aumentando el riesgo cardiovascular. Alternativas: reducir el uso crónico, corregir la dieta y, si hace falta, usar antiácidos menos agresivos por tiempo limitado".
Pero que no cunda el pánico, porque tal y como el propio Aurelio Rojas señala, "este vídeo no es para alarmarte, sino para darte herramientas. Porque el corazón también se cuida sabiendo qué metemos al cuerpo…".