Con la llegada del verano y el aumento de las temperaturas, muchas personas recurren al uso de ventiladores en casa como una solución práctica y económica para aliviar el calor.

Sin embargo, para que este recurso resulte realmente efectivo y no perjudique la salud, es fundamental tener en cuenta una serie de recomendaciones. Entre ellas, destacan dos claves esenciales: la distancia del aparato y su posición.

En primer lugar, el ventilador debe colocarse a una distancia prudente del cuerpo. Mantenerlo demasiado cerca o dirigirlo de manera fija hacia una parte específica puede provocar un enfriamiento excesivo de esa zona, lo que aumenta el riesgo de contracturas musculares.

Este tipo de dolencias son especialmente comunes en el cuello, la espalda o los hombros, y pueden afectar la movilidad y el bienestar general. Por ello, lo ideal es que el ventilador esté lo suficientemente lejos como para crear una brisa agradable sin impacto directo y constante sobre el cuerpo.

En segundo lugar, es fundamental evitar una corriente de aire fija. Un ventilador que no se mueve y permanece apuntando siempre al mismo lugar puede tener efectos negativos similares a los del aire acondicionado mal regulado. Es preferible optar por modelos que giren o se muevan, de manera que el aire circule de forma más natural y se reparta uniformemente por toda la habitación.

Ventilador de techo PIXABAY

Provocan sequedad

Otro aspecto relevante es el impacto del aire seco que producen estos aparatos. El uso prolongado del ventilador, especialmente en ambientes cerrados, puede provocar sequedad en las mucosas nasales, en los ojos, la boca y también en la piel.

Esta sequedad no solo resulta incómoda, sino que puede derivar en una bajada de defensas del organismo, favoreciendo la aparición de infecciones respiratorias.

Para contrarrestar este efecto, se recomienda combinar el uso del ventilador con un humidificador. Este dispositivo ayuda a mantener el nivel de humedad adecuado en el ambiente, mejorando la calidad del aire y protegiendo nuestras vías respiratorias.

Reacciones alérgicas

Las personas alérgicas deben prestar especial atención al uso de ventiladores. Al remover el aire sin filtrar, estos aparatos pueden levantar y distribuir partículas como polvo, ácaros, polen o pelos de animales.

Esto puede desencadenar reacciones alérgicas o agravar síntomas respiratorios ya existentes. Por ello, es esencial mantener el entorno limpio, libre de polvo y, de ser posible, utilizar ventiladores en espacios bien ventilados y húmedos.

¿Cuáles son los ventiladores más rentables?

Entre los diferentes tipos de ventiladores disponibles en el mercado, los de techo son los más recomendables. Al estar ubicados en lo alto, lejos del cuerpo, remueven el aire de forma más completa y equilibrada.

Además, no generan una corriente directa, lo que los hace más saludables para un uso prolongado durante la noche o el día.