El grupo ecologista y antinuclear Eguzki ha denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente la muerte por disparo de escopeta de un águila calzada en el término municipal de Errezil. El ejemplar fue hallado el 2 de octubre aún con vida y conducido a Arrano Etxea, en Igeldo, donde murió este pasado jueves.

Según ha explicado Eguzki, el águila calzada (Hieraaetus pennatus) es una especie incluida en el Catálogo de Especies Amenazadas en la categoría de "Raras". Está, por tanto, protegida y su abatimiento por disparo "puede constituir un delito contra la fauna castigado incluso con pena de cárcel".

Tras lamentar que "quienes aprietan el gatillo en estos casos muy raramente son identificados y, por tanto, castigados, ni siquiera cuando están rodeados de compañeros legales", la asociación ecologista ha explicado que han denunciado el caso, como han denunciado en los últimos años otros similares, para "visibilizar que en este ámbito se siguen cometiendo impunemente delitos contra el medio ambiente" porque "el abatimiento por disparo de especies protegidas no es algo puntual, sino habitual, crónico".

"Y es evidente que las administraciones públicas, en este caso la Diputación, siguen sin tomar medidas para atajar el problema", ha censurado.