¿Cómo llega el Ampo Ordizia a esta nueva temporada?

Ojalá que bien. Hemos tenido unas cinco semanas de pretemporada muy buenas, y tuvimos ocho semanas de post temporada muy buenas en mayo y junio. Cuando terminó la liga hicimos una revisión del primer equipo y nos dimos cuentas de cuáles eran nuestras debilidades y nuestras fortalezas, y atacamos nuestras debilidades.

¿Cuál fue el diagnóstico?

Empezar a cambiar el plan de juego. El Ordizia venía jugando de una misma manera los últimos años y le fue muy efectivo, pero creo que no fuimos lo suficientemente sorpresivos para los demás equipos. Siempre jugábamos de la misma manera y nos podían neutralizar. También creo que dimos en la tecla encontrando debilidades en la parte física y empezamos un trabajo de convencimiento de que dominando físicamente íbamos a estar más cerca de dominar los partidos en cuanto al tanteador. A finales de agosto comenzamos esta pretemporada que por ahora viene muy bien, con mucha alegría. Obviamente las presiones todavía están muy lejos, pero las expectativas son altísimas, porque creo que estamos empezando a llegar al punto en el que queremos estar. Luego, hay que demostrarlo en el campo, todos los partidos van a ser muy duros y esta liga año a año ha demostrado que la exigencia es altísima.

¿Cuál es el objetivo del equipo?

Nuestro objetivo principal es mantenernos en la categoría y aspirar a quedarnos en el grupo de arriba, sabiendo que no somos el equipo más poderoso, ni económicamente ni por plantilla, en cuanto a jugadores profesionales o fichajes. Sabiendo cuáles son nuestras limitaciones y nuestras fortalezas, trataremos de prolongar estos veinte años en División de Honor y aspirar al Grupo A 

Este año, dos equipos perderán directamente la categoría. 

Eso habla a las claras de que la competencia será cada vez más dura. Quedar en el Grupo B va a ser muy duro para todos los equipos. 

La División de Honor A se encamina a una liga con diez equipos en la 2026-27. ¿Qué le parece?

Creo que es un poco brusco para todos los equipos, más que nada por lo dispar que es el campeonato económico, por así decirlo. Lo más lógico es que hubiera sido más progresivo. Pero las reglas son iguales para todos, y sabíamos que iba a ser así. 

¿Qué le parece la plantilla?

Muy buena. Primero, son muy buenas personas, que para nosotros es sumamente importante, y además hay una combinación de experiencia y juventud que el Ordizia no tenía desde hace tiempo. Quiero trabajar con un grupo de 33 jugadores. Algunos ya están listos para competir en División de Honor y otros tendrán que recorrer un camino un poco más largo. No depende tanto de la edad, sino del puesto y del rodaje de cada puesto. No es lo mismo un pilier de 22 años o un medio melé de 22 años. Cada uno tiene su proceso madurativo. Somos muy cuidadosos para que cada uno pueda competir en su mejor nivel en el momento que le toque. 

Ha habido varias llegadas a la plantilla. ¿Tiene lo que quería?

Sí. Han venido jugadores con experiencia en ligas de muy buen nivel. Tenemos lo que queríamos y están aportando algo muy bonito al equipo. 

La temporada pasada no dejó un buen sabor de boca. ¿Le han dado la vuelta?

Sí, estamos con fuerzas renovadas y con muchas ideas del juego y del equipo renovadas. La verdad es que la pretemporada se está desarrollando muy bien. Somos muy conscientes de lo que hemos hecho la temporada pasada, y eso nos pone en nuestro sitio. Tenemos que saber que no somos uno de los equipos más poderosos de la liga, pero creo que podemos serlo. No lo digo a nivel económico. El potencial del equipo es muy alto, pero para eso tendremos que transitar por momentos de alegría y de frustración, y de mucho trabajo. Creo que hemos dado en la tecla con los cambios que hemos hecho. 

¿Qué le parece el calendario liguero y sus continuas interrupciones?

No es sano para nadie jugar 16 jornadas. Creo que se benefician a unos pocos y se perjudica a la gran mayoría, y eso el Ordizia lo ha dicho durante mucho tiempo. Hay que ser más consecuente con los jugadores. Los jugadores necesitan jugar. Si les quitamos la competencia, el jugador no se puede desarrollar. Jugar 16 jornadas en diez meses es una locura. Nadie le encuentra la lógica. O le encontrarán la lógica esos pocos que sí compiten un poco más, pero a mí me parece que el formato de la liga no es sano, no es competitivo y tampoco es llamativo para venderlo. No es un buen producto. 

La Copa también cambiará de formato. En noviembre, en principio, se jugarán algunos partidos. 

Estamos llegando a finales de septiembre y la Federación todavía no ha dicho contra quién va a jugar cada rival. Y aquí hay intereses económicos. No es lo mismo jugar en casa o que nos toque jugar en Sevilla y tener que programar el viaje de un día para otro como están hoy los costos. Esto no es sano para nadie. Y habla un poco de la desorganización que hay desde ese lado. Nosotros estamos listos para competir, pero si no nos dan las herramientas para organizarnos bien no será seductor para nadie. La historia del Ordizia en la Copa del Rey es muy bonita y ojalá la podamos representar como lo hizo el Ordizia hace varios años, porque sería una alegría enorme para Euskadi y para Ordizia. Sí sabemos que tenemos que dar la cara y que tenemos que poner a Ordizia los más alto posible, porque es una competición que le sienta bien. 

Debutarán en la liga el domingo de la semana que viene visitando a les Abelles. 

Les Abelles nos ha ganado los últimos partidos en un campo que para nosotros tiene algunas notas negativas. Anthony Nazabal se lesionó allí, y la temporada anterior Carvajales se rompió la rodilla allí, y esa misma temporada se lesionaron otros dos compañeros. Para nosotros es un desafío enorme. Las dos últimas temporadas perdimos en la primera jornada en casa. Ir de visita igual nos pone en nuestro sitio. 

El día 13 jugarán su primer partido en Altamira, ante el Cisneros. ¿Qué mensaje enviaría a la afición para que se enganchara al equipo esta temporada?

Estamos trabajando para poder expresar lo que el pueblo quiere ver. Somos conscientes de que ganando partidos, la afición viene. Pero, demostrando los valores que quiere ver, el equipo enamora. Creo que vamos a enamorar a la afición para que venga todos los domingos a Altamira. El Ordizia siempre ha sido muy fuerte como local, y eso habla muy bien de la afición. Los invito a venir, a alentar al equipo y que sepan que son una pieza fundamental.