Primer objetivo de la temporada conseguido. La Liga Euskotren ya es de Arraun Lagunak.

Sí, la verdad que sí. Era un gran objetivo que teníamos marcado, lo hemos conseguido y estamos súper contentas y súper felices del trabajo realizado durante toda la temporada. Hemos ido líderes desde la primera jornada hasta la última y algo habremos hecho bien para conseguir eso.

Han tenido que llegar hasta la última jornada para cerrarla, pero es verdad que entraron al último fin de semana con pocas opciones de perderla.

Nosotras estábamos con los pies en el suelo porque siempre te puede pasar algo. Siempre hay muchos detalles que igual no los controlas y siempre tienes ese punto de nerviosismo, porque tienes que tener muchas cosas atadas. Pero viendo la temporada que hemos hecho, siendo primeras y segundas salvo un día que fuimos terceras, estábamos tranquilas en ese sentido. Yo creo que haciendo nuestra regata, incluso haciéndolo mal, íbamos a estar ahí y yo creo que por dentro estábamos celebrando el título, pero queríamos hacerlo lo mejor posible y ganar la bandera. Al final todo ha salido bien, como se veía venir. Seis puntos a falta de dos regatas era mucha diferencia, puede pasar de todo pero interiormente ya sabíamos que teníamos la corona muy cerca. Pero había que disputar la regata, eso sí, que siempre puede pasar algo.

Pocas formas mejores de ganar la liga que ganando la Ikurriña de Zarautz. El guion perfecto.

El colofón es el idóneo, el que tú quieres. Los objetivos son claros, quieres la liga y la Bandera de La Concha, pero siempre sumando el máximo de banderas. Zarautz todos sabemos qué bandera es y qué peso tiene en el Cantábrico, todos la queremos ganar y siempre la tienes marcada. Además era algo histórico para nosotras porque era la primera que venía a la ciudad y a nuestro club, tenía muchos alicientes esta bandera para nosotras. ¿El objetivo era la liga? Sí. ¿Ganarla ganando la Ikurriña de Zarautz? Sensacional. La verdad que fue un día redondo y así estaba el equipo, la directiva y la afición, nos dimos una alegría. A la tarde en el recibimiento se veía que la gente estaba con muchas ganas de celebrarlo, porque sabes que ha salido todo bien, que has hecho un regatón y que has luchado hasta el último momento porque casi perdemos la bandera a última hora, la ola que pudimos coger nos salvó, y eso hace que estés muy contento. Esa alegría al entrar en meta fue un colofón grande, fue ganar la Ikurriña y además la liga.

Los dos días tuvieron que saber resistir, el sábado en el primer largo y el domingo en el de vuelta. No lo han tenido fácil, como por otro lado se podía esperar.

Si este año hemos aprendido una cosa es que hay que sufrir todos los días. Lo he mencionado antes, los pequeños detalles. Por ejemplo, yo en la regata del sábado sabía que íbamos a sufrir en la primera parte, porque al final la experiencia te da saber eso, y así se lo dije al equipo, que íbamos a sufrir mucho en el primer tramo de regata y que la clave iba a estar al llegar a la ciaboga, a ver si Tolosaldea se quedaba atrás para aprovechar la calle y que ese podía ser nuestro momento. Lo dije y las remeras lo hicieron. Esa madurez sí nos ha hecho crecer, el sufrimiento del año pasado nos ha hecho crecer como equipo, y la gente tiene esa madurez y tranquilidad de saber que si hacemos nuestro trabajo bien y damos nuestro cien por cien vamos a ser un equipo difícil de batir, y también te da tener esa pausa para aguantar el chaparrón cuando van las cosas mal dadas y esperar a nuestro momento. La del sábado para mí fue nuestra regata más completa de la temporada, porque me quedé super contento del rendimiento del equipo. Les felicité por todo lo alto, estaba más contento el sábado que casi con el triunfo de ayer. Se ha demostrado que somos un equipazo y tenemos que disfrutar de lo que hemos hecho.

¿Pensaba ayer que se le escapaba la bandera en los últimos metros? ¿O estaba tranquilo?

Hubo un momento que sí. Nosotras tampoco nos queríamos mover mucho de la calle para no entrar en peleas con Orio, ni acercarnos, evitar eso y asegurar. Hasta los últimos metros veníamos bien, en cabeza con Donostiarra, un segundo arriba o abajo, pero la cosa se puso fea faltando 200 metros. Luego ya vi la ola y dije a Andrea (Astudillo) que la cogiera, que metiera bien la popa que era lo que nos iba a salvar, y así fue. Hay que aprovechar tus momentos buenos y saber aguantar. Ellas tampoco subieron de ritmo de una forma exagerada, fueron a sacar su máximo rendimiento y supieron estar en ese momento. Eso es lo que nos dio la bandera.

Volviendo a la liga, ¿esperaban ganar con tanta renta?

Yo veía que el equipo estaba bien y que iba a hacer una gran liga. También sabía que iba a estar muy disputada y difícil, marcada por los pequeños detalles y que la cabeza iba a jugar un papel importante, tanto a favor como en contra. Estamos tres grandes equipos en muy pocos segundos, sin olvidarme de Tolosaldea que ha sabido estar ahí arriba en muchas regatas y ha pegado al palo dos veces con dos segundos puestos. Este año estaba complicado, y se está complicando más. En la liga femenina siempre ha habido grandes equipos pero a lo mejor podías ganar con algo más de margen, ahora no tienes ese margen. Son detalles muy pulidos, el remo femenino ha crecido mucho y se ve que los pequeños detalles a veces son difíciles de controlar. Nosotras hemos acertado ahí este año, y esa ha sido la clave. Hemos tenido buen saber estar. Se hablaba antes de la liga entre la gente y la prensa que Arraun Lagunak parecía que no iba a estar tan bien o que en los campeonatos no estuvimos a la altura, pero dentro del vestuario había tranquilidad y sabíamos que nuestro momento iba a llegar cuando tenía que llegar. Sabíamos que junio nos iba a pasar factura por la preparación, porque tuvimos bajas y porque no pudimos completar la trainera por temas de trabajo, tuvimos problemas de ese tipo, pero que luego íbamos a ser un bote con mucha solidez. Empezamos ya bien en A Coruña y dentro del vestuario estábamos convencidas de que íbamos a ganar, u optar a ganar.

Le cojo el guante, es verdad que a principio de temporada se comentaba que este año Arraun Lagunak parecía partir un peldaño por detrás con lo visto en los test y en los campeonatos de Gipuzkoa y Euskadi. Usted imagino que no tuvo dudas y sabía que podían optar a la liga, los test son los test y la liga es otra historia.

Sí, además la gente hacía mucho hincapié en los test. Pero nosotras por ejemplo en San Pedro lo hicimos muy bien. Algunos equipos decían que habían hecho pruebas, pues como nosotras en otros test. Los test son justo eso, test. Con respecto a los campeonatos de Euskadi y de Gipuzkoa, nosotras nos cruzamos en los entrenamientos con Donostiarra, entrenamos en Pasaia prácticamente todos los días, y yo ya decía que iba a ser difícil ganarles. Además, entre lesiones y trabajo también nos fue difícil completar el bote. Yo le dije al equipo que había que tener tranquilidad, los resultados tienen que venir después, si pensamos en ganar la liga y la Bandera de la Concha dar mucho en junio nos podía pasar factura, e íbamos de menos a más, entonces hemos sabido estar ahí, decir las cosas claras, como las veíamos. Como entrenador por supuesto que quieres ganar todo, pero a la plantilla hay que decirle la realidad, no estábamos en ese momento para ganar, en ese momento estábamos para intentarlo, y si nos salía bien perfecto. Nuestra apuesta era llegar bien a A Coruña, y es donde empezamos bien. En A Coruña el bote empezaba a soltarse y nos tranquilizamos, el bote ya estaba andando bien y las propias remeras se daban cuenta dentro. Si marcas la pauta y sale bien todo es mucho más sencillo, pero yo no he tenido dudas ni he perdido en ningún momento la confianza en este equipo, sabía que teníamos un buen equipo, pero había que trabajarlo bien, ellas se lo han creído y hemos logrado lo que hemos logrado.

Usted que lleva muchos años en el remo femenino ¿cómo valora la primera liga con ocho equipos?

Lo valoro como algo positivo. El remo femenino va subiendo poco a poco. Tiempo al tiempo, hay gente que quiere correr mucho, y yo siempre digo que hay poca historia en el remo femenino. Vamos a darle tiempo, vamos a pasar los mismos años que en el remo masculino y ahí se verá la progresión que hay. No vamos a mentir, la presencia de las mujeres en el deporte en esta sociedad es minoritaria, pero ahora por fin la gente empieza a ver el deporte de otro modo, cada vez más mujeres lo practican y eso se va viendo día a día. Eso va a servir para que vaya creciendo poco a poco, y esto ha sido un pasito más. ¿Que hay mucha diferencia de la primera a la última? Sí, en la masculina también, de la primera a la última hay un mundo. En todas las categorías hay diferencias, en el remo femenino igual. Cada uno tiene su tanda y su quehacer en cada tanda. La primera tanda ha sido competitiva para ganarla, quizás Hondarribia ha estado por encima, pero Hibaika y Cabo han estado muchas veces en la guerra, ha sido una tanda muy bonita para verla. Y de la primera tanda qué te voy a contar, ha sido espectacular, en muy pocos segundos tres o cuatro botes, no hay más que ver la tanda del domingo. Son diez minutos, sí, es ida y vuelta pero hay que estar ahí, hay muy poco margen de error y los detalles son muy importantes. Se ve un paso adelante en el remo femenino, ha sido una medida muy positiva y al que le guste el remo lo habrá disfrutado.

A estas alturas le tengo que preguntar por la Bandera de la Concha. Como ganadoras de la liga no es descabellado poner la etiqueta de favorita a la ‘Lugañene’…

Nosotras hemos demostrado que siempre estamos ahí y que somos un bote difícil de batir. Lo hemos demostrado este año donde hemos ido quedando primeras o segundas, y la Bandera de La Concha se basa también en la regularidad. Ganarla o no va a estar en muy pocos segundos de diferencia, estoy convencido. Ojalá me equivoque y ganemos la primera jornada por veinte segundos y la segunda por otros veinte, pero eso no va a suceder. ¿Que vamos a estar ahí? Sí. ¿Ponernos la vitola de favoritas? Pues es normal y como tal lo tenemos que asumir. Si nos ponen como favoritas es porque hemos hecho bien las cosas y porque hemos demostrado suficiente solvencia como para decir que hemos sido un líder sólido. Hemos ganado la liga bien y hay muchos números para decir que podemos ganar la bandera y que podemos ser favoritas. Nosotras tenemos ahora ese objetivo, el segundo gran objetivo del año que es ganar la Bandera de la Concha después de haber logrado el primero, que era ganar la liga. Ya hemos hecho la mitad del trabajo esta temporada, el equipo ahora sabe cual es el otro objetivo, va a poner todo su esfuerzo en ello y vamos a hacer seguro un gran papel.

Es la quinta liga que gana usted como entrenador, y si gana la Bandera de la Concha será su quinto doblete. Se ha acostumbrando a hacer equipos ganadores.

Bueno, o he tenido la suerte o también grandes compañeros. El preparador lleva conmigo unos años también. Nos llevamos bien, esto ha sido una unión de mucha gente. Yo valoro más el trabajo grupal y no miro mi palmarés, miro a nivel grupal. Cada año hay que construirlo, hay que trabajarlo, me está saliendo bien y es verdad que cinco es un número importante y lograr el quinto doblete sería espectacular. Pero bueno, lo que quiero es que disfrute el equipo, yo como remero he disfrutado y siempre se lo digo al grupo, si el equipo gana y disfruta yo soy uno más.