La actuación de los cuatro primeros clasificados despertó los elogios de los propios remeros y entrenadores en La Concha. Las dos embarcaciones que batieron el récord anterior, Urdaibai y Hondarribia, se perfilan como los principales favoritos.
“Será una bonita semana”
El entrenador de la Bou Bizkaia, Joseba Fernández, explicó que siempre intenta realizar “una buena primera jornada en La Concha, pensando que durante la semana se podrá sacar provecho de eso. Será una semana bonita”. El pasaitarra aseguró que le daba “igual” cuál fuera la calle de Urdaibai y se mostró prudente de cara a la próxima jornada: “La liga nos ha enseñado que hay mucha igualdad entre nosotros y que hay altibajos. No hay nada hecho, y veo la bandera igual de cerca, o de lejos, que antes de empezar”.
El azkoitiarra Jon Unanue también avisó de que “el próximo domingo empezaremos de cero”. El remero de Urdaibai fue consciente de que “las condiciones iban a ser muy adecuadas” para remar cuando vio el tiempo de Orio en la primera tanda.
El sanjuandarra Beñat Eizagirre, por su parte, destacó el nuevo récord fijado por la Bou Bizkaia: “Hemos hecho un regatón, no se puede pedir más, pero esto no se ha acabado aún. Los récords están para romperlos y era cuestión de tiempo que se hiciera. Lo hemos hecho, pero Hondarribia también lo ha hecho. Hay que tener cautela porque cuatro segundos no son nada y se van enseguida. Cautela máxima, y el récord se queda para nosotros”.
“Esperaba que el que ganara hiciera récord”
Ioseba Amunarriz regresará a la bahía donostiarra “con una gran ilusión para el próximo domingo”. El patrón de la Ama Guadalupekoa explicó que “viendo el tiempo de Orio, esperaba que el que ganara estableciera un nuevo récord. Nosotros no hemos perdido la cabeza y hemos estado peleando todo el rato. Amunarriz considera que la bandera no está lejos. Una mala calle te puede hacer perder esa ventaja”.
El presidente hondarribiarra, Joxemi Elduayen, también elogió la actuación de los hondarribiarras: “Poco más se nos puede pedir a una trainera de club como Hondarribia, con diez canteranos dentro. Dar este nivel es impresionante. Urdaibai sabemos que nunca falla, pero nosotros estamos muy orgullosos. ¡Cómo vamos a estar decepcionados si hemos conseguido remar en 18:57! Hay años de trabajo y es uno de los grandes días de Hondarribia, pero nos hemos encontrado con un rival superior y hay que felicitarle. Los tiempos de Orio y Kaiku también han sido muy buenos; se ha remado mucho y ha sido un día histórico”. El próximo domingo, “yo pediría que los nuestros salgan del agua con las mismas sensaciones que han tenido. Si lo hacemos así, seguro que estamos en la pelea por la bandera”.
“Cada tanda ha tenido condiciones diferentes”
El preparador de Orio, Jon Salsamendi, lamentó los cambios en el estado de la mar entre las dos tandas: “Nos ha faltado tener las mismas condiciones que en la segunda tanda. Siempre intentamos hacer nuestro trabajo, que ha sido increíble. Pero en la segunda tanda Urdaibai y Hondarribia han hecho una gran regata. Las condiciones en las dos tandas han sido diferentes. El dato de Orio es que su récord era 19:16 y hoy hemos hecho 19:03. Ha sido una regata muy rápida, trabajada y exigente... La pena para nosotros es que las condiciones de las dos tandas han sido muy diferentes. El domingo que viene todos estaremos en la misma tanda. Con la diferencia perdida lo lógico sería que pidiéramos movimiento, pero nunca lo he hecho porque la mar pone a cada uno en su sitio”.
El patrón de la San Nikolas, Gorka Aranberri, explicó que durante su tanda acusaron “mucho viento en contra, sobre todo a partir de las balizas hacia la isla, y de estar a cuatro segundos hemos pasado a diez”. El zarauztarra apuesta por “venir el domingo que viene con la misma ilusión y las mismas ganas. Lo de esta regata ha sido un castigo enorme y brutal. Vendremos a ganar”.
Por su parte, el presidente oriotarra, Ibon Huegun, destacó que el tiempo de la San Nikolas fue “el mejor de la historia de Orio, a solo cuatro segundos del récord de Castro. Ha sido un espectáculo tener dos equipos bajando de 19 minutos. Eso quiere decir mucho sobre la calidad que hay ahora mismo en el remo”.
“El récord podría estar en 18:40”
El director deportivo de Kaiku, José Luis Korta, no se mostró sorprendido por el nuevo récord: “Sabemos que andan rápido y el viento se ha quedado en nada. Sabía que el récord lo podían batir y lo han hecho. Yo ya dije hace años que el récord podía estar en 18:40 y he tenido tripulaciones que lo podían batir, pero no se hizo por las condiciones que hubo en ese momento”.
El de Ortzaika puso un “sobresaliente” a sus remeros y confesó que “habría firmado hacer esto al final de temporada. Espero estar bien también el domingo, y que gane el que más vatios tenga”.
Korta avisó de que “cuatro segundos con mala mar no es nada, así que ojo. Y Orio también está en disposición de ganar, aunque el que mejor lo tiene es Bermeo”.
“Hemos hecho un tiempazo”
El presidente de San Juan, Xabier Arraras, destacó la actuación de sus remeros: “Estamos muy contentos. Hemos hecho un tiempo de 19:31, que es un tiempazo, y con eso estamos los penúltimos, por lo que se ve que hay mucho nivel. Así que el próximo domingo vendremos con ilusión. Hoy -por ayer- no sales con un buen sabor de boca, pero aún queda la segunda jornada”. “En la liga estamos en el sexto puesto, pero Tirán es una trainera muy dura y nos ha superado; intentaremos darle la vuelta el próximo domingo. Voluntad y ganas no nos van a faltar”, agregó.
“Hemos apretado, pero no ha sido suficiente”
Pese a haber logrado el mejor tiempo jamás logrado por una embarcación de Donostia en La Concha, Hegoi Intxauspe no terminó “tan a gusto” la regata, “porque hemos sido octavos. El tiempo era para hacer récord”. El remero de la Bantxa destacó la pugna por la penúltima plaza entre la Donostiarra y San Juan, que bogó en la tanda anterior : “A la altura de la isla solo nos separaban cuatro segundos. Lo hemos intentado y hemos apretado, pero no ha sido suficiente” como para no descolgarse de los sanjuandarras. Intxauspe reconoció que “el verdadero objetivo” de Donostiarra “es ascender, pero en esta regata no estábamos pensando en eso”.