donostia - Se abre un nuevo frente en la temporada arraunlari. Tras el inicio de las dos ligas ARC, primero, y la Eusko Label después, llega la Liga EuskoTren con una nueva edición que afianza su cartel. La competición femenina arranca en Orio con el mayor número de participantes en el play-off. Serán diez las traineras que suelten la estacha con un único objetivo: hacerse un hueco en la mejor competición. Quedan atrás las probaturas que cada técnico ha hecho en la liga guipuzcoana, todas ellas con las miras puestas al play-off que pone en juego las cuatro plazas que dan permiso a participar en la Euskotren.
A priori, San Juan tiene todas las papeletas para estar un año más con las mejores. Las vigentes campeonas se han mostrado muy fuertes tanto en pretemporada como en la liga guipuzcoana, donde han conseguido ganar todas las banderas. Además, las bateleras no tienen otro trabajo que quedar entre las cinco primeras en una de las dos regatas del play-off, que se jugarán entre hoy y mañana en Orio y Donostia.
Después de las rosas asoma Hibaika. Las de Errenteria parecen fijas en todas las quinielas y deberían obtener su pase sin demasiadas dificultades. En semejante tesitura se encuentra Orio, que, tras unos años a la sombra de los dos grandes, ha conseguido conformar un bloque que puede dar la sorpresa en alguna regata. Muestra de ello es la última prueba de la pretemporada, en Lekeitio, donde el equipo de Xanti Zabaleta consiguió batir a sus rivales y adjudicarse la bandera, si bien es cierto que el Campeonato de España de tranerillas condicionó la participación. Aún así, parece que las patroneadas por Nadeth Agirre podrán hacerse un hueco si sacan provecho del conocimiento que tienen del campo de regateo oriotarra y rematan la faena en mar abierto, un medio que en los últimos años se les ha dado bien.
Salvo sorpresa, Arraun Lagunak y Hernani podrán estar en la pelea por el cuarto puesto. Ambos clubes han dado un paso adelante este año, con lo que lucharán por la última plaza con la única representante gallega, Cabo da Cruz. Las de Boiro se erigen como la gran incógnita, pues no han dado pistas durante el invierno. - J.A.H.