donostia - No será épica La Concha 2016, pero sí marcará una época. Lo harán sus protagonistas. Urdaibai y Hondarribia, la eterna pugna entre la mar y la tierra. El azul Bermeo de la mar. El verde Hondarribia de Urgull. Son los 1.78 segundos que han sobrevolado seis días dos pueblos en fiesta. Son la igualdad en el agua, esa que los diferencia tanto en tierra. Servirán el plato fuerte de una jornada de remo con un menú tres estrellas Michelín.

En su conjunto, la regata se presenta incomparable. Sobresaliente. Con una regata femenina que abrirá la boca de aficionados y curiosos cuando San Juan, Hibaika y Orio salgan a batirse en duelo. Tres segundos separan al trío. La mar los pondrá en su cajón del podio y sólo una de ellas ondeará la bandera.

Después llegarán ellos. Los que llevan 120 ediciones vaciándose por llegar primeros a meta. Exprimiendo cuerpo y alma por su pueblo o por el pueblo que les paga. No siempre remando tres millas náuticas, tampoco es igual el remo de ahora que el de hace medio siglo. Ahora bien, nunca antes 5.558 metros darán para tanto. Del primero al octavo, la concha promete. Todos con sus objetivos, algunos comunes y otros no tanto. Desde la batalla al segundo de los dos primeros, al cronómetro a cero del octavo, el local Donostiarra, que remará sin diferencias, buscando dar su mejor imagen para partir hacia el play-off de ascenso a la elite con las mejores sensaciones. Una circunstancia que, de darse, suele ir acompañada de buenos resultados.

Diferente cuestión será la batalla entre el cuarto y el séptimo puesto. Doce segundos separan a San Juan y a Tirán. Siete, a los rosas con los galipos de Zierbena, que sueñan con cotas altas en su vuelta a La Concha.

Al agua, junto a los mejores, partirá la trainera sanjuandarra. Un premio a su trayectoria este verano, pero también a un proyecto. Joseba Fernández y toda la familia rosa se muestran ilusionados con sus posibilidades de, cuanto menos, aguantar entre los cuatro primeros y, por qué no, atrapar a Kaiku y colarse en la foto del podio. La Bizkaitarra aventaja en diez segundos a la Erreka. Una diferencia complicada de remontar, pero desde el club ya avisan: “Vamos a dar guerra. El bote está muy rápido y, si tenemos suerte con la calle, haremos una gran regata”. En Orio esperan que los deseos de San Juan no se cumplan. Tras una primera jornada que acabó en decepción, los aguiluchos quieren redimirse saliendo vencedores de una primera tanda en la que serán máximos favoritos, y marcar un crono que les permita aspirar a colarse en la mitad alta de la general.

el duelo Dónde estará el momento. La clave que marque la diferencia. Una pregunta sin respuesta que ha tenido en vilo a los remeros. Muchos optan por desconectar las horas antes. Van al cine, de compras, a ver otros deportes... Lo que sea con tal de no pensar. El tramo de ciaboga decidió la concha de 2015 y dio alas a Urdaibai el pasado domingo. Pero el largo de brancas y el final, ya en la bahía, de Hondarribia fueron memorables. Los verdes quieren aplicar su remada, “si lo hacemos, podremos remontar”, confían en sus tostas. Esta Ama Guadalupekoa sabe lo que es perder la Bandera de La Concha tras partir líder con menos de dos segundos de ventaja. Ahora le queda ganarla. Cazar la ola de la victoria más grande. El duelo de la década está servido.