La declaración de Imanol Alguacil al término del partido ante el Barcelona pasó bastante inadvertida. Radiante de orgullo y de felicidad, el técnico quiso acordarse de los jugadores que menos utiliza, los habituales en sus particulares lunes al sol en Zubieta, donde les exprime para que no pierdan ritmo de competición después de otro fin de semana sin apenas haber tenido protagonismo: “Lo primero que he hecho al entrar en el vestuario ha sido felicitar no a los que han jugado, tampoco a los que han salido del banquillo, sino a los que no han participado. Los mismos que muchas veces se están quedando fuera de las convocatorias, porque a mí esos jugadores me dan la vida y eso para mí es más importante que cualquier victoria como haya podido lograr como la del Barcelona”.

Los doce realistas que menos minutos han tenido en lo que llevamos de temporada son fijos en las instalaciones de Zubieta durante los parones. Está compuesto por nueve canteranos más los porteros Fraga y Arana, que siguen inéditos por motivos obvios, al ser Marrero el único que ha tenido minutos en estos dos últimos años en lugar de Remiro. A los que hay que sumar a Zakharyan, que trabaja para estrenarse esta temporada; Traoré, que lucha por reaparecer antes del final de este curso; y Sadiq. Ninguno de ellos ha superado los 400 minutos. El que más ha jugado ha sido Aritz Elustondo, con 379 minutos. 

Cumplen un sueño

Lo que quería decir Imanol es que, aunque no lo parezca, aparte de estar siempre preparados para competir, como lo demostró el propio beasaindarra este pasado domingo con una exhibición impresionante en despejes en el área, son imprescindibles para que la unidad A e incluso la unidad B, que son los que están contando con bastantes minutos, estén obligados a mantener la tensión y a no bajar la guardia en ningún momento. Es evidente que siendo el entrenador un hombre de la casa prefiera contar con mayoría de la cantera en esta tercera unidad para evitar malas caras al sentir el club y, aunque antepongan, como es lógico, sus situaciones personales y busquen un mayor protagonismo en el equipo, que se tomen la experiencia como una oportunidad única que no pueden desaprovechar. En realidad están cumpliendo un sueño. 

Pero, pese a que Imanol tuvo un buen detalle con ellos, su ambición es jugar y contar con más minutos. Y si su situación se demora en el tiempo, como todo apunta a que será complicado que no sea así, lo normal es que busquen soluciones. Por poner un ejemplo, ahí está el caso de Olasagasti, que contaba con buenas ofertas este verano para salir cedido, pero a quien Imanol expresamente le pidió que se quedara al asegurarle que contaría con un mayor protagonismo. Hasta la fecha solo ha disputado 79 minutos... No es el único. No son pocos los que también se preguntan cómo es posible que la dirección deportiva no haya buscando un destino a préstamo para Urko, que lleva 46 minutos. Magunazelaia solo ha jugado seis y era el capitán del Sanse...

Menos lesionados

En el club consideran que ese perfil de futbolista con pretendientes y valor de mercado es el ideal para quedarse en Zubieta como uno más del primer equipo aunque lo tengan muy complicado para jugar.

Lo que también queda claro en el análisis del rendimiento de la primera plantilla es que Imanol está dando más protagonismo que otros años a la unidad B para intentar llegar a febrero y marzo en plenitud de condiciones con el objetivo de asaltar la Copa y la Europa League. Con Óskarsson, que lleva cinco más, son 16 los realistas que ya han superado la barrera de los 400 minutos cuando solo llevamos un tercio completado de la temporada. Y eso se está notando mucho en la enfermería...