La Real sigue recibiendo muy pocas noticias positivas en la enfermería. O al menos muchas menos de las que espera y necesita. El último en caer ha sido Aritz Elustondo, que se lesionó el domingo en el Santiago Bernabéu en una acción aparentemente fortuita con Camavinga en la que se llevó la peor parte de un choque abajo al que fueron los dos con todo. El parte médico especifica lo esperado: “En las pruebas de imagen realizadas se observa un esguince del tobillo derecho, producido durante el partido Real Madrid-Real Sociedad, el día 29-01-2023. Ha comenzado el tratamiento mediante fisioterapia. La vuelta a su actividad habitual dependerá de las características de la lesión y la evolución del proceso”.
Lo más peligroso es que ese tobillo ya le dio muchos problemas hace dos campañas cuando sin saber los motivos se le hinchaba de la noche a la mañana. No hay más que recordar lo que le sucedió en Turín en vísperas de enfrentarse al Manches United cuando se levantó con una pelota en la zona afectada y se quedó sin competir con el consiguiente disgusto. En principio, en función de su evolución, se va a perder varios encuentros
Una pena porque el beasaindarra estaba jugando a un gran nivel y se había adueñado del lateral derecho en parte debido a las bajas de Gorosabel y de Sola. En lo que llevamos de temporada ha jugado más partido en la cal que en el eje de la zaga y también ha completado muchas mejores actuaciones en esa demarcación.
