Xabi Prieto ya sabe lo que es jugar y marcar en el nuevo Anoeta. Todos sus goles y todas sus comparecencias oficiales en el estadio se habían producido con las pistas de atletismo aún presentes. Sin embargo, la semana pasada se vistió de corto para disputar un partido con aficionados de la Real Sociedad adheridos al plan de Fan Tokens del club a través de socios.com. Tras ofrecer muestras de su clase ataviado con una camiseta amarilla distintiva, el excapitán txuri-urdin atendió a NOTICIAS DE GIPUZKOA para parar revista a la actualidad blanquiazul.

Xabi Prieto. Socio número...

(Risas) No lo sé. Me has pillado.

Pero está disfrutando con el equipo.

Sí, mucho además. Ya son casi cuatro años ocupando posiciones europeas, haciendo un buen fútbol, y dando un gran paso en el continente con esa primera plaza de grupo ante todo un Manchester United. La Real ganó en Old Trafford, en Moldavia y en Chipre, costando lo que cuesta hacerlo a domicilio.

¿Siente que nació demasiado pronto? Habiéndolo hecho más tarde, viviría sobre el verde la época actual.

No, no, yo estoy muy contento con el año en el que nací (1983). Ahora me está tocando vivir la buena trayectoria de la Real desde otro papel, en el rol de socio. Vengo a Anoeta con mi familia, y mis hijos también lo disfrutan todo un montón. El estadio ha quedado precioso, acuden más de 30.000 espectadores a cada partido y el momento del club es estupendo.

“Me gusta mucho la propuesta del equipo en la presión, en la salida desde atrás... Es muy completo y se adapta a cada contexto”

¿Se da la vuelta para celebrar los goles?

No, porque en mi zona (señala con la cabeza a la grada próxima al palco presidencial) la gente no se gira. Pero ganas sí que me dan de hacerlo.

Aunque usted estuvo lesionado a lo largo de casi toda aquella época, Imanol fue su entrenador durante apenas dos meses, en 2018. ¿Qué se le veía entonces?

En un primer momento, lo más llamativo fue esa misma exigencia con la que está sacando un rendimiento máximo de cada jugador. Él nos demandaba mucho en el día a día, en cada entrenamiento. Y a partir de ahí, yo creo que él como entrenador se está superando a sí mismo temporada tras temporada, evolucionando y añadiéndole registros al equipo. Supongo que para esto le ayudará la confianza adquirida mediante la experiencia acumulada. Creo que en diciembre cumplirá cuatro años con el equipo, ¿no?

¿Se ve como jugador compitiendo en este equipo de despliegue físico tan grande y presionando en uno para uno por todo el campo como ordena el míster?

Con quince años menos igual sí (risas). Me gusta mucho la propuesta de este equipo, no solo a la hora de apretar arriba como comentas, sino también sacando el balón desde atrás, siendo agresivo, buscando los espacios o al hombre libre... Estamos viendo una Real muy completa que se adapta bien a los diferentes contextos que se le pueden presentar.

¿Con qué ojos mira al equipo y al juego en general? ¿Con los de un futuro entrenador?

No. No me veo en el cargo, la verdad. Es cierto que en su día me saqué todos los títulos pertinentes, pero no me veo como técnico.

¿Quizás sí en los despachos? Ejerciendo de director deportivo.

De momento estoy muy bien como estoy. Y tampoco ha pasado tanto tiempo desde que me retiré.Es cierto que cada vez veo más fútbol, y que me sigue enganchando, ya sea por la televisión o en directo.

“Voy a Anoeta como socio, con mi familia, y disfruto mucho; estoy bien como estoy y no me planteo una carrera como técnico”

¿Cómo podemos calificar la situación de la Real en el presente parón mundialista?

Es sensacional. En la Liga estás tercero después de encadenar una racha muy larga sin derrotas y en la que ganaste la mayoría de los partidos. Y en Europa arrancas con un quince de quince antes del partido contra el United, en el que te servía perder por la mínima. Hasta la fecha, la temporada es fantástica.

¿Por que el equipo logra ahora compaginar con éxito varias competiciones, jugando cada tres o cuatro días? ¿Es cuestión de físico, de mentalidad...? En su época costaba mucho más.

Yo creo que se ha juntado un poco todo. Lo explicaría, principalmente, desde el hecho de haber entrado en Europa durante tres años consecutivos, porque ayuda a que el jugador se vaya adaptando.

Y haber disputado duelos como una final de Copa seguro que también influye. ¿Cómo recuerda la noche de La Cartuja?

Tuve la suerte de estar allí y lo viví con muchos nervios, pero con mucha felicidad final. Es cierto que faltó disfrutar el título con la afición, porque esos festejos son lo más bonito que hay. Pero esa Copa ahí queda. Fue una pasada.

Marcó de penalti Oyarzabal, quien apuntaba a infalible como usted pero que ha vivido también sus malas rachas desde los once metros.

Todo futbolista sabe que algún día le va a llegar el momento de fallar, pero Mikel es un fenomenal lanzador. Yo estoy muy tranquilo cuando veo que va a tirar él. Alguno más errará, porque es a lo que se expone uno en esta clase de situaciones, pero creo que Oyarzabal las afronta francamente bien.

Con el VAR en vigor usted mismo habría tenido que ejecutar bastantes más penaltis. ¿Qué opina del videoarbitraje?

No lo llegué a conocer en primera persona, porque lo implantaron justo durante el verano en el que me retiré, en 2018. El VAR me gusta mucho como herramienta, pero creo que hay que ajustar cosas.

La roja a Aritz contra el Valencia, por ejemplo.

Sí, esa y otras muchas que están habiendo. El otro día leía la comparativa de expulsiones entre la Liga y la Premier, donde se producen muchas menos. Pienso que deberíamos tender a esto último.

Voy terminando. ¿Dónde situamos el foco para lo que resta de temporada? ¿Prioridad para un nuevo billete europeo, le hace ilusión avanzar más en Europa o apostamos por otra Copa del Rey?

A mí me hace ilusión todo. Y además el equipo me asegura que, juegue el torneo que juegue, da el cien por cien y compite siempre. No me queda ninguna duda de que esta Real va a seguir ahí arriba en puestos europeos, metiéndose incluso en la Champions League algún año. Esta hinchada y este estadio lo disfrutarían muchísimo.

Y mientras Zubieta no para de alimentar al primer equipo.

No para, no para, gracias al gran trabajo que se está haciendo en la cantera. Los jugadores jóvenes llegan arriba mucho más preparados física, técnica y mentalmente. Da gusto verles sobre el campo y da gusto también sentir que el entrenador les deja esa puerta abierta.