Partido en Anoeta. Con público en las gradas. Victoria de la Real. ¿Qué más se puede pedir? Que el triunfo suponga puntos, claro. Pero estamos todavía en julio, en plena ruta hacia lo que realmente trasciende. Durante el camino no importa tanto el resultado, aunque ganar nunca sobra. Importan más las formas. Y este equipo acredita, en finales de Copa y en bolos estivales, una personalidad a prueba de bombas. Se trata de un fenomenal punto de partida, no ya de cara al nuevo curso, sino mirando al futuro en general. Porque aparecen nuevos nombres. Caras nuevas. Potrillos promocionados. Y aquí todo el mundo habla el mismo idioma futbolístico. Sucede hasta el punto de que un equipo plagado de chavales venció ayer con cierta solvencia a un rival en obras aún, el Alavés de Calleja.

Imanol recibió malas noticias durante las horas previas al encuentro, durante las que unas leves molestias dejaron a David Silva fuera de concurso. La lista de bajas creció así hasta las ocho: Monreal, Illarramendi, Guevara, Kevin, Ryan, Bautista, Merquelanz y el canario, ausencias a las que cabe unir las de los internacionales Isak, Zubimendi, Oyarzabal, Merino y Sagnan. En total, trece integrantes del plantel, unos más importantes que otros, con los que no pudo contar el técnico oriotarra. Resulta una obviedad que semejante panorama condiciona cualquier partido, por muy amistoso que sea. Así que todos los análisis deben situarse dentro de este contexto. A partir del mismo, en cualquier caso, siempre hay lecturas que extraer de los duelos de preparación. El de ayer las dejó positivas y negativas, más buenas que malas.

Gran Arranque

Primero y muy relevante: la Real sigue dañando a sus adversarios. Y lo hace, principalmente, porque su fórmula original resulta difícilmente contrarrestable. Los txuri-urdin cuentan para la salida de balón con pies privilegiados, más privilegiados aún ahora que Pacheco ha subido al primer equipo. El de Elizondo, Aritz y Turrientes han creado en solo dos partidos un triángulo que alumbra el juego ofensivo txuri-urdin a través de combinaciones rápidas, tensas y precisas mediante las que encontrar al tercer hombre. Este puede ser un lateral. Un interior. El delantero centro incluso. Pero la superioridad aparece casi siempre. ¿Cómo defiendes esto? Reculando es más fácil, pero pierdes capacidad de sorpresa ante un equipo, el txuri-urdin, de voraz presión tras pérdida.

Así desarboló la Real al Alavés ayer durante unos 20 minutos iniciales muy buenos. El balón fluyó ante el 4-4-2 del rival, cuyos dos pivotes no daban abasto, ni siquiera con las ayudas de sus interiores. Los de Imanol jugaban a un toque. Dos a lo sumo. Y superaban líneas de forma clara para encontrar casi siempre al irregular Januzaj, capaz de lo mejor y de lo no tan bueno en solo 45 minutos. Marcó el belga el 1-0 desde fuera del área. Y, sin ser el encuentro un asedio constante, el segundo parecía más cerca que el empate. Ocurrió, en cambio, que igualó el Alavés. ¿Cómo?

Iniciaron los babazorros un ataque desde el eje de su zaga y terminaron provocando un penalti, tras superar el habitual 4-4-2 al que mutan los txuri-urdin para defender. La Real empezó utilizándolo para la presión alta, como el sábado anterior ante el Huesca. Pero en ambos casos la estructura se ha demostrado vulnerable ante un movimiento idéntico, el de los extremos rivales que vienen dentro a recibir. Ferreiro el otro día. Manu García e Iván Martín esta vez. Se ubican a las espaldas de Turrientes y de su compañero en ese momentáneo doble pivote. Y hacen sangre.

Ajuste blanquiazul

La nueva estructura de presión txuri-urdin, con Januzaj dentro apretando al pivote, evitó nuevas transiciones visitantes. Pero los vitorianos demostraron que el gol les había sentado muy bien, alargando sus posesiones gracias a la salida de tres que ejercían con Pina. Conforme se acercaba el descanso, cada vez había menos rastro de esa Real mandona que tanto había agradado de inicio. Hasta que emergió al filo del intermedio un factor que también puede decidir partidos: la estrategia. Pacheco, con el pie y en la frontal del área pequeña, marcó el segundo y permitió a los suyos concluir la primera parte con ventaja.

La reanudación se vio marcada, en clave txuri-urdin, por un carrusel de cambios que varió la cara a la Real. Siguió presionando igual, ya ajustada. Y siguió intentando dar con superioridades en la zona ancha para lanzar a sus atacantes. Este último plan, sin embargo, estuvo condicionado por la presencia en el pivote de Peter Pokorny, quien relevó a Turrientes y gritó a los cuatro vientos cuáles son sus virtudes y sus carencias. Ve bien el juego de cara, posee un buen desplazamiento en largo, es decidido a la hora de apretar al poseedor y sabe meter el pie en el momento justo para robar al adversario que conduce el balón. Dicho esto, sufrirá en la Real, tanto en el primer equipo como en el Sanse, si no es capaz de ganar cierta soltura y manejo del esférico en espacios reducidos. Le cuesta un mundo recibir y pasar en situaciones de exigencia.

Con los de Imanol dominando en lo territorial y el Alavés generando peligrosas transiciones, varias tras errores del eslovaco en la circulación del balón, terminaron sentenciando los locales, marcando de nuevo a balón parado. Una falta sacada por un muy buen Dani Garrido, centrocampista del Sanse a quien Imanol recurrió de urgencia tras perder a Silva, la cabeceó tras rebote Igor Zubeldia en el segundo palo. Y así ganó la Real en el regreso de su gente al estadio, demostrándole que hay motivos para el optimismo. Casi año y medio después, lo bueno sigue ahí, incluso mejorado. Y lo malo lo ven desde el banquillo para cambiarlo.

Real Sociedad 3

Alavés 1

REAL SOCIEDAD A. Remiro, Gorosabel, Aritz, Pacheco, Aihen, Turrientes, López, Januzaj, Navarro, Barrenetxea y Carlos Fernández. También han jugado Zaldua, Zubeldia, Portu, Guridi, Willian J., Pokorny, Lobete, Sola y Garrido.

ALAVÉS Pacheco, R. Duarte, Laguardia, Lucas, T. Pina, Guidetti, Manu García, Iván Martín, Pere Pons, Martín y X. Navarro. También han jugado Tachi, Lejeune, Saúl, Toni Moya, Edgar, Carlos Isaac, Borja Sainz, Loum, Javi López y Abqar..

Goles 1-0, m.8 : Januzaj. 1-1,m .16: Lucas (p.), 2-1, m. 43: Pacheco. 3-1, m. 69: Zubeldia.

Árbitro Palencia Caballero. Amonestó al local Pacheco y a los visitantes Laguardia y Loum.

Incidencias Partido disputado en Anoeta con la presencia de más de 5.000 aficionados en las gradas.