- ¿Cómo es un día normal en la vida de Juan Luis Larrea?

-Me voy todos los días a pasear por el monte, cerca de dos horas y media. Vamos un grupo de amigos y es una manera de mantenerte un poco en forma. Si no bajas, por lo menos, el objetivo es no coger peso y eso me permite tener una calidad de vida. Intento también disfrutar de mis nietos. Pero tengo la pena de no poder disfrutar de mi hijo pequeño Alex, que está en Japón, y no podemos ir a visitarle. Es lo único que me falta. Sería la guinda del pastel.

Y, futbolísticamente hablando, ¿qué opinión le merece el año que ha tenido el fútbol guipuzcoano?

-Soy un jubilado, pero tengo una apreciación sobre las cosas que he visto. Me he ido con la satisfacción del deber cumplido, habiendo actuado honestamente. Se han hecho cosas. ¿Este año? Ha sido un año especialmente bueno, principalmente para la Real Sociedad, no así para el Eibar. También ha sido bueno para el Real Unión, que sería como nuestro tercer equipo, al margen del filial de la Real. Creo que ha sido un año bueno para el fútbol guipuzcoano. Quiero felicitar al Real Unión por la nueva etapa que se abre. Todo lo que sea incrementar las ayudas y la economía es positivo y si vienen con ganas de hacer cosas, eso es importante. Y no me quiero olvidar del Beti Gazte. Ascender a Tercera División también es bueno. Es un equipo navarro, pero está con nosotros desde toda la vida.

¿Disfruta más ahora del fútbol?

-No ha sido un año de poder disfrutar porque no hemos podido ir a los campos. A mí me gusta seguir el fútbol regional, a los juveniles. Lo he hecho siempre, bien porque era una de mis funciones, bien porque he tenido dos hijos que han estado jugando, y les he ido acompañando desde infantiles, cadetes, juveniles... Ha sido un año muy raro, de tener que ver los partidos en casa. Nadie esperaba que fuese a pasar esto. ¿Disfrutar del fútbol? Ha empezado la Eurocopa y ahora lo veo un poco más desde una posición neutral.

¿Lo ve de otra manera?

-Sí, de una manera más tranquila. Eso está claro. He estado más de 30 años de delegado de la selección, con lo que ahora no estaría en Donostia. Ahora me tocará disfrutar desde casa.

¿Lo echa de menos?

-No, te lo digo de verdad. Creo que hemos hecho mucho, hemos estado mucho tiempo y creo que hay que pasar página. Me gustaba el fútbol y me gustaba lo que hacía. Ahora veré a la Real desde mi localidad en Anoeta, feliz, tranquilo, y disfrutando, si nos dejan, de la próxima temporada. Tenemos Europa y tenemos muchas cosas para ver, como, por ejemplo, una Segunda División bonita. Hasta ahora los que han subido siendo filiales no han tenido mucha suerte, pero igual nosotros rompemos esta dinámica y el Sanse se consolida en Segunda. Tampoco sería malo.

¿Qué opinión le merece todo lo que ha conseguido la Real?

-Ha sido su año. Creo que el quinto puesto del primer equipo tiene mucho mérito. Jugar la Europa League se me antoja muy bueno. Es la medida que tenemos. Es mejor hacer un bonito papel en la Europa League, que no ir a la Champions y caer eliminado a las primeras de cambio. Esa es mi opinión. Hay que disfrutar. Y qué te voy a decir del filial. Poder ascender a Segunda División ha sido un premio importantísimo. Y el C también ha conseguido algo importante. Todos estos logros significan que algo tenemos, que algo estamos haciendo bien.

Pero no todo ha sido un camino de rosas para la Real con usted de presidente de la Federación Guipuzcoana, ¿no?

-Yo he vivido de todo. Me tocó vivir el descenso, pero pude disfrutar de un ascenso y ahora el equipo está más que consolidado, así que contento. Yo creo que tenemos mucho nivel. Creo que si trabajamos las cosas bien, no debería de haber problema para quedar casi siempre entre los seis primeros. Un año mejor, otro peor, pero tenemos que estar ahí, luchando por plazas europeas.

Ha visto muchos equipos de la Real. ¿Es éste uno de los mejores?

-Hemos visto equipos muy buenos, y una Real campeona de Liga. También la Real con Denoueix, que hizo un papel muy bonito. Lo importante en el fútbol es tener gol, sinceramente. El 80% de los partidos terminan por debajo de dos goles y si tienes jugadores que te hacen dos goles, normalmente ganas los partidos. Ahora estamos disfrutando de tener este tipo de plantilla. Hemos hecho una gran transición en la que hemos acertado con los fichajes. Yo soy defensor de la cantera por principios, pero sí creo que al equipo hay que reforzarlo con un par de futbolistas que puedan mejorarla. Ahora eso se está haciendo bien. Estamos ilusionados. Hay gente muy joven, gente que tiene una proyección importante, que si se consolidan en la Real, podemos hacer unos años bonitos. La afición está ilusionada.

¿Qué es lo que más le ha llamado la atención de esta Real?

-Que cualquiera que salía lo hacía como si hubiera estado jugando siempre en Primera División. Es verdad. Nadie sobra, pero se puede decir que tenemos jugadores de sobra. Tenemos todos los puestos bien cubiertos. Ahora ha salido incluso un goleador como Karrikaburu, que no deja de marcar. Es un chaval, pero está ilusionando mucho. Tiene gol y eso es muy importante. Teniendo gol en las categorías inferiores y ya no tan inferiores, saber estar ahí, en el área pequeña, es muy importante. Sinceramente, estoy muy ilusionado de cara a la próxima temporada.

¿Da un poco de pena no disfrutar desde dentro con esta época tan bonita?

-Sinceramente, no me da pena. Está siendo un año, por todo lo referente a la pandemia que estamos viviendo, en el que prácticamente no tengo noticias. Así que no sé cómo esta la situación. Nosotros hicimos una apuesta por el fútbol guipuzcoano, hemos trabajado mucho por él, y lo que quiero es que todo vuelva la normalidad. Y si se vuelve a la normalidad, disfrutaré desde fuera, yendo a los campos y viendo partidos. Sinceramente, yo he estado mucho tiempo. Me he entregado en cuerpo y alma. Creo que mi gestión ha sido buena, tanto la económica como la deportiva. Nos hemos volcado. Si tenemos en cuenta cómo han mejorado las instalaciones de Gipuzkoa en los últimos 30 años.... Esto es otra cosa. Todos los pueblos tienen buenas instalaciones.

¿Vive el fútbol guipuzcoano su mejor momento?

-Sí. Igual se está reflejando más por todo lo bueno que ha hecho la Real. El único punto negro ha sido el descenso del Eibar, que yo espero que este año próximo vuelva a subir. El haber estado siete años en Primera División no es ninguna tontería. Estaba consolidado en Primera División. Les ha faltado algo, ha sido un año raro, quizá la afición. Yo creo que al Eibar le ha perjudicado mucho. Vamos a ver si son capaces de ascender nuevamente.

Entra en Anoeta y ¿qué sensación le produce?

-Si apenas he tenido tiempo de disfrutarlo... Llevo de socio 50 años. Tengo mi localidad a la derecha del palco, he estado pagando mi abono todos estos años y ahora iré a mi localidad.

¿Cómo ha podido compaginar durante tanto tiempo su puesto en la Federación Española y su cargo de presidente en la Federación Guipuzcoana de fútbol

-Quitándoselo a mi familia, no había otra. Antes yo tenía que ir a trabajar todos los días. Ahora, gracias a Dios, estoy jubilado y tengo más tiempo libre. Por ejemplo, ahora estaría con la selección en La Cartuja, pero también tendría que coger aviones para venir a Donostia a trabajar al banco. Pero a mí siempre me ha dado tiempo a todo, por lo menos, lo intentaba. Seguro que a alguien he fallado y si lo he hecho, que me disculpe.

¿Ha merecido la pena todo ese sacrificio?

-Sin duda. El fútbol me ha dado mucho más de lo que yo le he dado a él. Me he entregado, porque me gustaba, pero todo lo que me ha dado el fútbol (amigos, relaciones...). He llegado a estar hasta en el Comité Ejecutivo de la UEFA. ¿Qué quieres? No tengo más que agradecer todo lo que me ha dado el fútbol.

También le ha tocado vivir cosas desagradables como todo el tema Ángel María Villar...

-Sí, me han tocado vivir épocas complicadas, pero lo bueno siempre ha compensado a lo otro. Me olvido de lo malo e intento quedarme con lo bueno. Hemos vivido momentos en los que me tocó dar un paso al frente cuando pasó lo de Ángel María Villar en la Federación Española. Por cierto, eso sucedió un 18 de julio de 2017 y cuatro años después está el caso en diligencias previas, por lo que muy claro el tema no debía estar. Sigo apostando por él. Creo que es un hombre íntegro. Sigo apostando firmemente por él. Fue un caza de brujas. Yo, siendo tesorero, sabía que no tenía nada que ver con todo lo que se decía de él. Yo, tampoco. Igual la gente estaba cansada de vernos. Yo creo que a mí también me pasó un poco lo mismo. Lo único que había hecho mal es que llevaba mucho tiempo. Si eso es todo lo malo....

Otro nombre propio muy relacionado con la figura de Juan Luis Larrea es la de Javi Clemente...

-Es un hombre al que le gusta estar en activo y a pesar de tener 71 años está como un chaval. Ahora está en Túnez entrenando porque en Libia no debe haber buenas instalaciones. Espero que haga el mejor papel posible. Es muy buen amigo y creo que está bien valorado.

¿Cómo recuerda su etapa en la Real?

-Estuvo un año. Vino con mucha ilusión, pero no le salieron bien las cosas. Apostó por un portero que no acertó como Asper. Lo había estado viendo en directo, pero la apuesta no salió bien. Es un hombre de fútbol, que no lo ha hecho mal, que saber hacer las cosas. Que aquí no acertó, bueno, pero ha estado en un montón de clubs y está considerado. Le deseo lo mejor, que triunfe.

¿Qué supuso para Juan Luis Larrea ver a la Real ganando de nuevo un título?

-Me dio muchísima pena no poder disfrutarlo en el campo. Puedo decir que estaba invitado al palco, pero sinceramente creía que si la afición no podía ir, yo tampoco. No era nadie. Estaba fuera de la federación. Pero el presidente de la Real me invitó a acudir al campo. Hubiera sido un broche a mi carrera. Porque yo entré de presidente cuando la Real ganó la Copa del 87. Hubiera sido un broche final importante. Ya había salido, por lo que no tenía ningún sentido. Lo disfruté desde mi casa, con mi familia. No tengo ninguna duda de qué equipo somos.

¿Se siente reconocido por todo lo que ha hecho?

-Quiero pensar que sí. Dentro del fútbol guipuzcoano, seguro. Si no me reconocen, será tema de ellos, no mío. No tengo que mirar hacia atrás. Creo que sí. Hay gente que te llama, te ve... hay gente que te valora y te anima, pero no necesito ánimos. Estoy muy bien, muy tranquilo, disfrutando de la vida. Espero vivir mucho y ver lo bien que lo hacen otros.