- Marcelino García Toral volvió a su versión más conocida, la de lamentarse por todo e intentar justificar la derrota agarrándose a cualquier tipo de excusa. A algunos se han empezado a quitar la careta tras la derrota en la final de la Copa: "Lo hemos visto todos, la Real está contenta porque ganó pero no por cómo jugó, el fin justifica los medios en este caso. Nosotros estamos más descontentos que la Real y el árbitro no puede estar contento tampoco por su actuación, estará como nosotros de descontento". Una manifestación delirante después de que las imágenes demostraran ayer que la mano de Iñigo Martínez era claramente dentro del área con el 0-0 en el marcador y que, la corrección de su roja directa admite muchas discusiones, incluso para los especialistas en la materia.

Fiel a su personalidad, el asturiano se perdió en sorprendentes lamentaciones: "Pero no quiero hablar de él más porque para nada ha influido en el resultado de este partido". Y sin venir mucho a cuento, también criticó a la Real por su actuación y porque no le dejó jugar. Igual el plan del Athletic era jugar como el Ajax de Cruyff y finalmente no lo consiguió, al parecer, por las faltas de su rival y la supuesta mala actuación del trencilla: "Tampoco la Real hizo nada del otro mundo, visto y analizado el partido nos queda la sensación de que fue un partido malísimo: muy mal jugado por la Real y por el Athletic, muy mal dirigido por el árbitro, fue un encuentro impropio de una final de Copa y la ganó el equipo que se aprovechó de un error del rival".

Lo que si confirmó Marcelino es que su equipo no tendrá problemas para hacer el pasillo al campeón de la Copa cuando salten al terreno de juego ambos contrincantes esta noche: "El Athletic es un club señor y haremos el pasillo a la Real, que es lo que corresponde". Menos señorial fue su manual de excusas...