- Al 95%, la final de Copa entre la Real y el Athletic se disputará el 4 de abril de 2021. Es lo que dicen en privado, a día de hoy, desde la Federación Española, tal y como informó NOTICIAS DE GIPUZKOA en la edición de ayer. Pero todavía hay un 5% de opciones de que la final más importante para el club txuri-urdin desde hace 32 años se adelante en el calendario, librando a su afición de tener que buscar vuelos y hotel en Sevilla para un domingo de Resurrección que, como todo el mundo sabe, es día -y noche- grande en la capital hispalense.

Según ha podido saber este periódico, el organismo federativo, aunque por el momento lo ve "improbable", confía en poder adelantar la fecha a una más cercana. Esa es su intención. Pero eso sí, siempre que una mejoría en la lucha contra la pandemia del COVID-19 permita la entrada de afición a las gradas del estadio de La Cartuja, sede de la final copera. Es una de las dos condiciones que pone sobre la mesa el organismo que preside Luis Rubiales, y con la que los dos clubes vascos están de acuerdo. Por ello renunciaron al billete europeo vía Copa hace pocos meses. La segunda es que el 4 de abril es la fecha límite para la disputa del partido. Con o sin afición, ese día, como tarde, sabremos el nombre del campeón.

Conocida la intención de la Federación, cabe analizar varios aspectos. El primero, el desarrollo de la pandemia en España. Para la disputa con público del encuentro será indispensable que el número de contagios por coronavirus descienda en los próximos meses y se alcance un periodo de estabilización del virus que permita que la llegada masiva de aficionados a Sevilla, y posteriormente a La Cartuja, no suponga un posible problema sanitario a posteriori. La salud está por encima de cualquier evento deportivo, y eso lo tienen muy presente todos los organismos participantes en la organización de la final de Copa.

Por otro lado está el aspecto deportivo. La Real, con Europa como aliciente especial esta temporada, tendrá un calendario muy apretado. Como mínimo, 47 partidos disputará este curso el equipo txuri-urdin, que si lo borda, podría llegar hasta los 62 encuentros. De producirse el dichoso escenario de alcanzar la final de la Europa League, la Supercopa de España y la Copa 2020-2021, encuadrar la final de Copa del pasado curso se complicaría sobremanera. Cabe recordar que en 2021 habrá Eurocopa y Juegos Olímpicos, lo que ha obligado a comprimir todas las ligas de fútbol, incluida la española. De ahí que se haya previsto que la final de Copa se ubique el 4 de abril. Pero como ya explicábamos ayer, no es la opción que más agrada ni a los clubes ni, sobre todo, a las aficiones.

Los precios de los hoteles y de los vuelos se multiplican el fin de semana más importante del año para la ciudad hispalense, que recibe cada año (a excepción del 2020) a cientos de miles de turistas por esas fechas. Tampoco es favorable la designación para la Real en cuanto a su preparación, puesto que, de volver a vivir un año copero inmaculado, los txuri-urdin jugarían dos finales de esta competición en trece días. Y con el arranque de los cuartos de final de la Europa League (8 de abril), por medio.

Por todo ello, la Federación es partidaria del adelanto. La opción más factible y sensata parece la de aplazarse una jornada de Liga de la Real y del Athletic para que se pueda disputar la final ese fin de semana y concretar con los otros dos equipos implicados una nueva fecha para el partido liguero. Es lo que se hace cada vez que un equipo español disputa el Mundial de Clubes, y hasta el día de hoy no ha supuesto ningún quebradero de cabeza para nadie.

En cualquier otra temporada, una de las fechas que sonaría con fuerza para la disputa de la final sería la época navideña. Sin embargo, esta Navidad será diferente puesto que la Liga ha llegado a un acuerdo con la AFE (principal asociación de futbolistas) y la Federación para que haya fútbol de Primera División el 22-23 de diciembre y el 30 de diciembre, en la víspera de Nochevieja.

Además, las fechas entre semana también están más demandadas que nunca. A las habituales jornadas europeas, fijadas en los jueves, esta temporada habrá que sumar hasta cinco jornadas de la Liga entre semana, comprimiendo aún más el calendario txuri-urdin. Un quebradero de cabeza y de fechas que tiene visos de no acabar aquí. Como todo desde marzo, la última palabra parece que la tendrá el COVID-19.

La fecha no gusta ni al club ni a la afición, ya que encarecería el viaje, por ser Semana Santa, pero el calendario está casi completo

Si la pandemia lo permite, la opción más factible para adelantar la final es aplazar un partido de Liga, como sucede en el Mundialito