- Ni partidos, ni entrenamientos, ni visitas. "Iban a venir los amigos de la cuadrilla, para ver en directo las clásicas de las Ardenas. Pero al final, nada de nada". Jon Bautista, cedido en la liga belga, vive a 30 kilómetros de Valkenburg, a 35 kilómetros de Lieja y a 70 de Huy, escenarios de Amstel Gold Race, Lieja-Bastogne-Lieja y Flecha Valona respectivamente. "Y hoy (por ayer) era la etapa de casa en la Itzulia", recuerda también el delantero errenteriarra, de 24 años. Así arranca, en tono más informal, una llamada a priori ajena al ciclismo y destinada a hablar de otro deporte. De fútbol. El actual jugador del Eupen sigue teniendo mucho que decir con un balón en los pies.

¿La suspensión del campeonato belga es definitiva?

-No, no. Parece que hay una reunión programada para el próximo miércoles, y que entonces terminará de decidirse todo.

Así que sigue entrenando, aunque sea por su cuenta.

-Eso es. Yo hago todos los días lo que manda el preparador físico del equipo. Además, aquí en Bélgica se puede salir a la calle para practicar deporte. Y esto me facilita un poco las cosas.

¿Cómo funciona allí lo del confinamiento?

-Se puede salir a correr, por ejemplo. Y está permitido incluso hacerlo acompañado, aunque solo por alguien que viva contigo en el mismo domicilio.

¿Y ya le sirve esto último para ejercitarse en compañía?

-Bueno, sí. Mi novia sale conmigo a hacer ejercicio de vez en cuando, y me puede seguir o no en función de lo que yo apriete (risas).

Continúa con el plan de entrenamientos pensando en que la liga podría reanudarse. ¿En qué punto estaba el torneo?

-Nos quedaba una sola jornada para terminar la liga regular. Y después empezaban ya los play-off.

¿Y qué se iba a jugar en ellos el Eupen? Creo que entender el sistema de competición convalida asignaturas enteras de ingeniería.

-Nos iban a juntar a diez equipos de primera, del séptimo al colista, con los seis primeros equipos de segunda. En total, 16. Y nos iban a dividir en cuatro grupos para disputar liguillas a doble vuelta. Los campeones de cada una disputaban luego una final four entre ellos. Y el ganador de esta se jugaba después una plaza para la Europa League contra el quinto clasificado de la liguilla por el título, la que debían disputar los seis primeros del torneo regular. Es un poco extraño todo.

¿Y el descenso?

-Aquí solo desciende un equipo, el colista de la liga regular. Nosotros nos libramos hace ya tres jornadas. Y la pelea quedaba pendiente de la última jornada, con dos candidatos a bajar.

¿Qué nivel se ha encontrado en el campeonato?

-Pues la belga es una liga bastante potente. Vine sin excesivas referencias, porque no se trata de un torneo muy conocido. Pero luego compites en él y ves que los jugadores son físicos y muy rápidos. Creo que aquí está la gran diferencia respecto a la liga española. El belga es un campeonato mucho más físico.

¿Qué le ha pasado esta temporada al Anderlecht? Iba a quedarse fuera del 'play-off' por el título. ¡Ni entre los seis primeros!

-Es algo de lo que se habla bastante en el país. Al fin y al cabo, estamos hablando de uno de los grandes clubes del fútbol belga. Empezaron mal la temporada y poco a poco fueron dándole la vuelta, pero tenían muy difícil meterse en el play-off por el título en la jornada que quedaba pendiente.

¿Y qué me dice de su Eupen?

-A nosotros también nos costó arrancar y entrar en una buena dinámica. Aquí la liga empieza pronto, en julio, y durante el primer mes de competición, con el mercado aún abierto, llegaban futbolistas nuevos todas las semanas. Cuando aterrizaron todos los refuerzos, terminamos de conformar un buen grupo. Y, poco a poco, los resultados fueron mejorando (el equipo es ahora 13º en una liga de 16). Además, jugando bastante bien.

Habla de muchos futbolistas nuevos... Y con procedencias muy distintas.

-Es cierto. En la plantilla hay representadas muchas nacionalidades. Hay mucha diversidad. Pero ya te digo que se ha conformado un grupo muy majo.

Belgas, alemanes, holandeses, españoles, bosnios, portugueses, iranís, africanos de diferentes países... ¿En qué idioma se habla en ese vestuario?

-Pues en inglés. Como casi todos lo dominamos... Así se dirige al equipo el míster. Aunque, como en la plantilla hay igualmente varios futbolistas de habla francesa, también se escucha el francés.

¿Eupen está en la zona francófona de Bélgica?

-No. Estamos a cinco kilómetros de la frontera con Alemania y aquí el idioma principal, en el pueblo, es el alemán.

Lenguas, ligas y sistemas de competición al margen... ¿Qué tal le va a Jon Bautista?

-Bien. Tengo la pena de no haber hecho más goles (ha marcado tres), pero estoy disfrutando de la temporada, jugando además en posiciones distintas. Me siento mejor jugador, más completo.

¿Por qué zonas del campo se ha movido?

-He jugado en ambas bandas y también como mediapunta.

¿Qué esquema emplea su entrenador, el guipuzcoano Beñat San José?

-Últimamente veníamos empleando un dibujo de tres centrales y carrileros, con dos puntas. Pero en los primeros partidos utilizamos el 4-4-2 en rombo, conmigo en el vértice del centro del campo, y también el 4-3-3, esquema en el que llegué a jugar tanto en la banda izquierda como por la banda derecha.

Me decía que ahora se siente mejor futbolista.

-Sí. Vine a Bélgica para completar un año de aprendizaje y yo creo que la temporada sí que me ha servido para crecer. Es cierto que esa evolución no se ha plasmado en goles, pero creo que, teniendo en cuenta el rol que me ha tocado desempeñar y las distintas posiciones que he ocupado, ahora soy un jugador más completo que hace solo unos meses. A esto ha ayudado también lo que te comentaba antes sobre el perfil de la propia liga belga: es mucho más física, y debes adaptarte a ello para competir mejor.

Imanol Agirretxe trabaja para la Real y se encarga del seguimiento de los cedidos. ¿Ha sentido su apoyo durante el curso?

-Sí, claro que sí. El club ha seguido preocupándose por mí desde mi primer día en Eupen. Y Agirretxe ha venido a visitarme varias veces ya. Hablo con él después de los partidos y siempre tiene palabras positivas. Me traslada que esté tranquilo, porque en la Real se encuentran satisfechos conmigo y ven que hago bien las cosas. Significa mucho escuchar cosas así de alguien como Agirretxe, que adquirió el nivel que adquirió tras haber vivido también una experiencia cedido.

¿Qué me dice de la temporada txuri-urdin?

-Buff (resopla). Es un espectáculo ver cómo juegan. Me he perdido muy pocos partidos. Y uno siente un gran orgullo cuando sigue a sus excompañeros y comprueba el nivel que están dando. Es una pasada.

Por un lado, la liga belga corre el riesgo de darse por terminada la semana que viene. Por otro, la FIFA anuncia que los actuales contratos que concluyen en junio se extenderán hasta que terminen los torneos. ¿En qué situación queda usted exactamente?

-Sí que es todo un poco confuso. Pero bueno, yo tampoco le doy muchas vueltas a la cabeza. En el Eupen nos han trasladado que estemos tranquilos, que la suspensión de la liga no es definitiva y que continuemos entrenando. Mi cesión expira el 30 de junio. Pero si el campeonato belga termina ya y los clubes llegan a un acuerdo, volveré a la Real.

Antes o después, ahora o en verano, tendrá que reincorporarse a la disciplina txuri-urdin. ¿Con qué perspectivas?

-Pues con todas las ganas del mundo y con la intención de dar el máximo desde el primer día de la pretemporada. Trataré de demostrar lo que valgo, porque mi objetivo es quedarme en la Real Sociedad y ser uno más en la plantilla, si Imanol y Roberto (Olabe) así lo desean.

"En Bélgica me he tenido que adaptar al carácter más físico de la liga, y he jugado tanto en ambas bandas como en la mediapunta"

"Parece que el miércoles deciden si la liga se suspende definitivamente; nosotros seguimos entrenando en casa"