Moyá solo completa parte de la sesión y está casi descartado para el once

donostia - Miguel Ángel Moyá está prácticamente descartado para el Bernabéu. Su lesión en la rodilla no ha evolucionado como pensaban él y el propio club y será Gero Rulli quien defienda la portería txuri-urdin en el Bernabéu. El argentino no juega desde el 1 de noviembre en el partido de Copa de Vigo.

El mallorquín tampoco pudo completar toda la sesión de ayer y, en el hipotético caso de que pueda ejercitarse con normalidad hoy y mañana todo parece indicar que como mucho le permitirá entrar en la convocatoria. En principio la intención de Imanol Alguacil era la de apurar hasta el último momento para tomar la elección definitiva entre los dos porteros, pero el hecho es que Moyá todavía no ha podido ejercitarse al mismo ritmo que sus compañeros cuando mañana se cumple una semana desde que se lesionó.

En los últimos días se ha especulado también con la posibilidad de que fuese una recaída de la dolencia que sufrió en verano o en el pasado en Mallorca. Moyá explicó así la acción fatídica que le va a dejar sin jugar en el Bernabéu, donde ha ganado tres veces: “El día 29, en una acción de un partidito específico corto, en un balón dividido, a punto de salir y de llegar yo y llegar William José, metimos los dos el pie, yo lo metí y en el momento de hacer la acción rápidamente vi que era una posición forzada, intenté arreglar la situación lo mejor que pude pero no pude evitar un gesto brusco, pero mirando para atrás lo que pude evitar fue una lesión mucho más grave. No tenemos un plazo. Esto del líquido pueden ser cuatro días o 15. Vamos a intentar que sea lo menos posible. Lo importante es recuperarlo bien y que no ha sido algo grave”.

Y también descartó que tuviera relación su lesión con ninguna otra anterior: “No es lo mismo. Esto ha sido un traumatismo, una torcedura de rodilla por una acción provocada aleatoria y lo demás fue un derrame no se sabe muy bien por qué, acumulación de trabajo o qué, pero no hubo una acción traumática para que se me hinchase. De la noche a la mañana no sabemos muy bien por qué, se me inflamó y tuve que estar 21 días de baja. Esto es diferente. No es una repetición de la pretemporada ni por asomo. Le podía haber pasado a cualquiera. Fue por una jugada dividida en la que metemos el pie y hay un mal apoyo. Yo vi que la pierna iba en mala posición y dije textualmente: Me he tirado como un saco de patatas. Igual un jugador más joven apoya, quiere seguir haciendo más fuerza en esa jugada y salta todo por los aires. Lo noté en el momento. Cuando caí al suelo y me levanté solo estaba pendiente de a ver qué sentía porque me asusté”, comentó - M.R.