donostia - La Real tenía apalabrada con el Atlético la contratación de Ángel Correa por un importe que ascendía a los doce millones de euros. En el acuerdo se pensaban incluir varias cláusulas que se iban a concretar en el momento en el que Diego Pablo Simeone accediera a la salida del delantero. Gil Marín, consejero delegado rojiblanco que mantiene una excelente relación con Jokin Aperribay sobre todo después del traspaso de Griezmann, se había comprometido a dar prioridad al club txuri-urdin. Desgraciadamente, la FIFA sancionó al equipo rojiblanco y le impidió reforzarse en el mercado de verano. El técnico cambió de planes y le comunicó a su compatriota que le necesitaba.
Como en enero ya iba a poder fichar y ya había cerrado las contrataciones de Vitolo y Diego Costa, que ya pueden jugar con la colchonera, se podía esperar que la Real tuviese opciones de hacerse con Correa en este mes. Como ya reconoció un dirigente blanquiazul, “el tema está muy difícil, porque nunca sabes lo que puede suceder en estos meses”. Lo que ha pasado es que Correa es el máximo anotador del Atlético y que Simeone ha decidido que los descartados sean Vietto, Gameiro y a Nico Gaitán. Este extremo argentino, que no ha cuajado en Madrid parece responder al perfil que busca la Real, pero la entidad atlética quiere recuperar parte de la inversión que hizo en su día y pide quince millones. Un argentino con el Mundial de fondo no suele ser mal negocio... - M.R.