Getafe, partido de entreguerras

donostia - Durante una temporada hay partidos y partidos. Muchos, la mayoría, resultan atractivos para el espectador, ávido de ver jugar a su equipo durante toda la semana. Pero también cabe afrontar encuentros como el de este mediodía en Getafe, una cita que reúne todas las connotaciones incómodas que pueda tener una contienda para la Real. Se desplazan los txuri-urdin al Coliseum Alfonso Pérez, un campo que históricamente se les ha dado mal, para medirse a un rival áspero a más no poder. Lo hacen con motivo de una jornada liguera emparedada entre el estreno copero de Lleida y la cita europea del jueves ante el Vardar. Y sufren ausencias en su centro del campo muy susceptibles de desnaturalizar el fútbol que les ha hecho fuertes de un tiempo a esta parte.

Con el regusto del gol de Canales en el Camp d’ Esports aún latente, la posibilidad en el horizonte cercano de certificar más de medio billete para los dieciseisavos europeos dentro de cuatro días, y a la espera de recuperar a dos piezas clave como Illarramendi y Zurutuza, el equipo de Eusebio afronta este mediodía un encuentro de entreguerras, en el que convendría obtener un buen resultado para no descuidar la trayectoria liguera. El conjunto guipuzcoano buscará la victoria con un once marcado por las citadas bajas en la zona ancha, pero que en el resto de líneas estará muy cerca de parecerse al considerado titular.

Un virus gástrico ronda el vestuario txuri-urdin. Se ha llevado por delante las opciones de participar en Getafe de Kevin, baja. Y, en previsión de problemas adicionales, el entrenador desplazó ayer a tierras madrileñas a 19 jugadores. Rulli estará en la puerta, mientras el recuperado Odriozola y De la Bella ocuparán los laterales. Todo apunta, mientras, a que Llorente e Iñigo repetirán en el eje de la zaga respecto al encuentro del pasado lunes ante el Espanyol. La medular, mientras, estaría compuesta por Igor Zubeldia, Rubén Pardo y Xabi Prieto, mientras la delantera, en la que parece segura la presencia de Willian José y Oyarzabal, depara quizás la gran incógnita de la alineación. No sería de extrañar que el gol de Canales en Lleida tenga premio para el cántabro, quien en este caso partiría desde uno de los extremos.

Las características del rival, un Getafe con Markel Bergara de capitán general, son las mencionadas. Se trata de un equipo rocoso y complicado, que hace de la intensidad durante los 90 minutos un arma innegociable ante la que solo cabe oponer idénticas dosis. A partir de ahí, que hable el fútbol. Y de eso la Real tiene mucho más.