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Año de cambios

Mikel Oyarzabal pasa revista a una temporada “inolvidable” tras la que aboga por mantener los pies en el suelo: “me queda mucho por aprender”

Año de cambios

donostia - Tal fin de semana como este, hace justo un año, Mikel Oyarzabal se disponía a cerrar la temporada con lo que supondría la eliminación del primer equipo juvenil de la Real en la Copa del Rey, a manos del Celta de Vigo. Doce meses después, el eibartarra ha pasado revista ante las cámaras de Real Sociedad TV a una campaña muy diferente para él, ya que aquel encuentro de A Madroa (derrota 4-2, con las dos dianas marcadas por el propio Oyarzabal) supondría su última comparecencia en la categoría. Desde entonces, y pese a continuar en edad juvenil, solo ha jugado con el Sanse, con la primera plantilla de la Real, con la selección española sub’19 y con el combinado estatal absoluto. Casi nada.

“En lo personal, ha sido mi mejor año, una temporada inolvidable. Me han pasado muchísimas cosas en poco tiempo, y todas han sido buenas. La llamada de la selección la podemos considerar como una guinda para el pastel de toda la campaña”, considera el futbolista blanquiazul, cuyo éxitos a lo largo de estos meses no han parado de sucederse. “Que si el debut, que si el primer gol... Todo el mundo te halaga y te felicita. Pero lo que un día son halagos, al siguiente pueden ser críticas. Así que hay que tomárselo todo con naturalidad y tranquilidad, tener los pies en el suelo y seguir trabajando para, el año que viene, continuar en la misma línea”.

Y es que, pese al importante peso que Oyarzabal ha demostrado tener sobre el campo en la dinámica txuri-urdin, dentro del vestuario aún es un recién llegado, estatus al que el canterano hace referencia sin ningún tipo de complejo. “Acabo de incorporarme como quien dice, soy el más joven y no tengo otra cosa que hacer más que aprender. A mi lado, en el vestuario, hay ejemplos de gente que lleva muchísimos años jugando con la Real, y yo lo que tengo que hacer es aprender de ellos”, indica el de Eibar, que poco a poco ha ido integrándose en el plantel. “Al principio llegas y estás un poco cortado. Siempre tienes esa vergüenza que cuesta quitarse de encima, pero luego coges confianza y ves cómo te apoyan todos desde el primer momento. He aprendido de todos y cada uno de mis compañeros. Y les estoy muy agradecido a todos”, señala Oyarzabal, quien completó la pasada pretemporada a las órdenes de Moyes, pero que no se incorporó por completo a la disciplina del grupo hasta el mes de enero.

“ganas e ilusión” En lo personal, la temporada no ha podido resultar más positiva para un Mikel Oyarzabal quien también se refiere a lo colectivo. “Ha sido un año duro, largo e intenso. En los últimos partidos ya veías que la carga se hacía notar, y encima ahí está también la tensión con la que vives todo, que también desgasta. Ahora tenemos un mes para descansar, para reponer fuerzas y volver con las pilas cargadas el primer día de entrenamientos. Entonces, una vez que estemos aquí, trabajaremos con ganas e ilusión para intentar hacerlo lo mejor posible, y para que luego durante el año podamos darnos una alegría a nosotros mismos y también a la afición”.

Oyarzabal iniciará la campaña como miembro de pleno derecho del plantel, y también con la recién estrenada etiqueta de internacional absoluto. “Ha sido una experiencia más para mí, una experiencia inolvidable, de esas que se te quedan grabadas. He estado trabajando con los mejores futbolistas del mundo. Y no es solo ir convocado... El hecho de debutar también ha sido importante para mí. Se trata de un momento que se te queda grabado y que no vas a olvidar nunca. Estoy satisfecho y espero que haya una siguiente vez”, reflexiona Oyarzabal, consciente de que el premio ha sido la recompensa a un buen trabajo. “Si vas allí y eres seleccionado, por algo será. El año ha sido bueno”, zanja el prometedor txuri-urdin.