donostia - Alberto de la Bella se mostró comprensivo por la bronca de la afición del pasado domingo: “No solo es por este partido, seguramente por el desánimo de toda la temporada al creer que su equipo podía pelear por posiciones europeas y no lo hemos conseguido. Fue una pitada un poco general por el año que ha sido de descontento con el equipo”.

El año no ha sido fácil para nadie: “Comparada con las últimas temporadas seguramente ha sido el de más desilusión. El equipo había dado mucho entrando en Champions y Europa League. Uno a lo bueno se acostumbra y ve el potencial que tiene el equipo. Este año se ha dado un paso atrás, esperemos que sea para dar dos adelante. Ha sido un año difícil; si hay que hacer una valoración hay que hacerla este mes, que ya estamos de vacaciones”.

La plantilla quiere resarcirse ganando en Vallecas: “Al final son números, pero lo que sí nos daría es un poco de buena sensación, de terminar bien la Liga después del varapalo del otro día. No es lo mismo irte de vacaciones habiendo hecho mal los últimos dos partidos que dando una buena imagen y siendo sobre todo competitivos fuera de casa otra vez”.

De la Bella negó que el equipo tuviera una prima especial por vencer los dos duelos que le quedaban: “A los jugadores no nos llega. Nosotros tenemos que salir a jugar igualmente, la motivación ya la tenemos cada uno con sus contratos, sus aspiraciones, sus objetivos individuales, y todos queremos participar en los partidos. Hablar de eso no toca”.

En lo personal ha sido su curso más duro: “Ha habido fases de todo. Al principio empecé jugando y participando en todos los partidos. Luego llegó la lesión. Llevaba unos partidos arrastrando algunas molestias y tuve que parar. Luego mi primer partido de reaparecer fue con el estreno del nuevo míster y me costó un poco coger la forma. Ha sido un año que seguramente no era el que esperaba, pero termina bien, me quedo con eso y espero que el año que viene continúe por la misma línea”. -M.R.