donostia - El técnico del Sanse, Imanol Alguacil, hace un “balance positivo” de la temporada del filial de la Real, que logró la salvación a falta de dos jornadas para el final. “Empezamos la liga con las típicas dudas de apostar por un equipo joven. Era una apuesta clara de club y de cantera. Venían muchos jugadores del juvenil. En el inicio nos costó: sacamos solo ocho puntos en ocho jornadas y eso luego cuesta remontar. A partir de entonces cogimos una buena racha, el equipo se fue asentando y cogiendo puntos, e incluso nos pusimos a mitad de tabla. Después, en esa parte en la que se decide si tirar para arriba o para abajo, los resultados no acompañaron”, apuntó en declaraciones a la página web del club blanquiazul.

El entrenador realista considera que “influyó que jugadores importantes para el Sanse estuvieran más cerca del primer equipo que del propio Sanse motivado por las circunstancias de la primera plantilla: lesiones, sanciones? Echamos un poco en falta a esa gente importante y el equipo se resintió. Eso también es fruto de que eres un filial y que estamos para ayudar al primer equipo. De hecho, estamos orgullosos porque los jugadores que han subido han dado el callo, han aportado y eso es importante para un club como la Real. Y al subir estos jugadores ha habido minutos para futbolistas más jóvenes. Al final se trata de echar una mano a los del primer equipo y que los nuestros se vayan curtiendo. En ese sentido esta temporada ha sido positiva”.

Eso sí, entiende que “es una pena no haber conseguido un pelín antes la salvación matemática. Creo que por méritos hechos por el equipo lo deberíamos haber hecho antes”.

En cualquier caso, ha sido una temporada en la que ha predominado el aprendizaje: “Aquí estamos ya cerca de lo que es el fútbol profesional y el paso ese a veces cuesta, pero yo creo que los chavales han respondido. Creo que eran conscientes de lo que nos estábamos jugando y estoy muy contento porque en los dos últimos meses, sobre todo habiendo muchas cosas en juego, los chavales han demostrado mucha personalidad. Es una pena que fuera de casa nos haya faltado sacar algunos puntos más, que por los méritos hechos nos los mereceríamos, pero eso ya es agua pasada. El aprendizaje ha sido brutal, sobre todo al final porque nos estábamos jugando mucho y hasta hace dos jornadas no teníamos la salvación matemática. De ese tipo de situaciones se aprende y mucho. Los jóvenes han respondido muy bien”.

División difícil Imanol dejó claro que la Segunda B es una categoría cada vez más complicada: “Nos hemos enfrentado a equipos filiales con la misma calidad o más que nosotros. Somos el filial más joven de la categoría y eso también es de valorar. Hay equipos que se han gastado mucho dinero por subir a Segunda. Hay muchos exjugadores de Segunda, y los equipos tienen experiencia y se juegan mucho. Voy a ser sincero, quitando un par de partidos, el Sanse ha estado muy cerca en todos esos encuentros de lograr algo positivo, y es de valorar en este grupo tan duro de la Segunda B”.

Imanol Alguacil, por último, se refirió a su experiencia personal en la primera campaña al frente del filial txuri-urdin: “Lo hemos sabido asumir y llevar. En la vida de los entrenadores hay veces que te dan sorpresas de este tipo. Yo no me imaginaba ser el entrenador del Sanse y ha sucedido así. Estoy contento y orgulloso de ser el entrenador del filial de la Real Sociedad, un equipo importante, que trabaja tanto y tan bien la cantera”. - N.G.