BILBAO. Podía ser cierto, pero no, es una broma. Esta pareja simuló el día de San Valentín cómo sería le pedida de matrimonio perfecta... hasta que la novia sale corriendo. En todos los casos la gente de alrededor se emociona, saca incluso sus cámaras para grabar la escena... pero la cara que se les queda tras la huída es la que no tiene desperdicio.