Un año después de su irrupción en las Juntas Generales de Gipuzkoa al frente del Grupo Popular y sus tres escaños, Lezama (Donostia, 1993) dibuja un PP abierto al “acuerdo entre todos”, "huyendo de la refriega política". Cree que el principal problema del territorio es el “envejecimiento" poblacional y ve “la inmigración como una oportunidad”. Al cierre de la entrevista apostilla que “las culturas diferentes nos van a enriquecer. El reto es cómo formarlos e integrarlos en la sociedad para hacerla más sostenible de cara al futuro”.

Le voy a pedir primero una valoración de este primer año de legislatura.

Es positiva. Creo que se nota el hecho de que tengamos un gobierno en minoría en Gipuzkoa, lo cual obliga a buscar puntos de vista diferentes, cosa que es positiva, que no todo sea aprobado como uno cree. Ver la visión del diferente siempre enriquece. En este año de legislatura, por ejemplo, muchas de las iniciativas que hemos llevado nosotros se han aprobado, creo que el 85 %, y ninguna se aprobó sólo con nuestra visión: todas han salido adelante con aportaciones de otros grupos y así se han enriquecido y seguramente van a ser mejores para toda la sociedad.

¿Algún ejemplo de acuerdo con otros grupos que le haya llamado la atención y a priori podría sorprenderle?

A mí no me sorprende el haber llegado a acuerdos con ellos. Yo creo que es más al resto. Por ejemplo, muy concretamente, un acuerdo que creo que se transaccionó con Bildu y Podemos sobre patología dual (adicción y otro trastorno mental), que es un tema que va a más y es un gran desconocido. Y muchas veces, otros partidos no nos esperan en estos temas. Pero hemos llevado un montón de cosas de servicios sociales, como la aprobación también del Estatuto del Cuidador, que se aprobó el primer mes de legislatura a propuesta nuestra, por unanimidad, o al menos sin votos en contra. 

“La ponencia fiscal ha sido todo un acierto y gracias a eso vamos a tener una fiscalidad muchísimo mejor”

¿Se han sentido importantes otra vez en el PP de Gipuzkoa?

Más que sentirnos importantes, a lo mejor se está rompiendo un cliché de cómo nos veían algunos. Es cierto que hemos recuperado una importancia en tanto en cuanto estamos siendo llave en muchas de las negociaciones, en prácticamente el 90% de las votaciones que se han llevado en las Juntas.

“Pata del Gobierno” u “oposición”. ¿Dónde está el PP de Gipuzkoa?

Pues estaremos con el que esté haciendo las cosas como creemos y no se nos caen los anillos, porque nuestra ideología es la de Gipuzkoa. Hemos venido aquí con la labor de trabajar por y para Gipuzkoa y para eso hay que llegar a entendimientos entre todos.

¿Por qué no hay presupuestos? 

Este es el único fallo que ha tenido hasta ahora la legislatura, porque en un tema tan importante como unos presupuestos para el territorio no se puede jugar a la política vieja.

¿Quién ha jugado a la vieja política?

No me quiero poner con el dedo acusador y tampoco sé hasta qué punto se pueden sacar las conversaciones de una reunión, pero lo que sí está claro es que el Gobierno no ha querido aprobar los presupuestos. Yo entono el ‘mea culpa’ por no haber tenido la capacidad de finalmente haber llegado a un acuerdo habiéndome dejado pelos en la gatera, pero es que ya llega un momento en el que están por encima los intereses del guipuzcoano. 

¿Cuál es el gran tema ahora mismo pendiente de la política guipuzcoana y qué se puede hacer? 

Para mí, el tema más importante es el demográfico, el del envejecimiento de la sociedad, sin ningún tipo de dudas, porque es un reto al que hay que hacerle frente ya sí o sí. Pero hay una cosa que subyace a todo esto y es la absoluta falta de liderazgo del territorio. Y creemos que la diputada general necesita desencorsetarse, salirse un poco de lo que espera su partido (EAJ-PNV) de ella, y remar de verdad por Gipuzkoa y ahí estaremos todos, el resto de partidos, empujando para ayudarle. Hace falta meter una quinta marcha.

Póngale una nota del 0 al 10 al Gobierno foral.

Le voy a poner un seis. No se le puede suspender. Lo que sí que creo es que se puede hacer mucho más.

“No me sorprende que estemos logrando acuerdos. A lo mejor se está rompiendo un cliché de cómo nos veían algunos”

¿Y cómo valora el papel de la oposición, excluyendo a su formación, el PP?

No sé si ha estado mejor o peor, pero sí ha sido más consciente de que hay un gobierno en minoría y ha buscado mucho más el llegar a acuerdos que el propio gobierno. Eso lo tengo clarísimo.

El debate de los eólicos

Hábleme de los eólicos en Gipuzkoa.

Nuestra posición es que hay que tirar para adelante, no sólo con eólicos, sino con todos los todos los sistemas de producción de energías renovables. Pero es cierto, y aquí es donde está el problema, que todos quieren eso pero nadie lo quiere en su casa. Ese es el resumen. En ese sentido, somos muy conservadores porque donde tenemos una rampa que no lleva a ningún lado, queremos seguir teniendo eso y no una carretera que lleve a unos eólicos.

¿Algún ejemplo?

El caso de Azpeitia es representativo. Lo que eran los molinos en sí no es lo que molestaba, sino todas las afecciones que tenía el construir la carretera que había que hacer hasta allí. Pues a lo mejor hay que dar la vuelta y empezar a pensar, mira, se colocan los molinos que se van a necesitar y luego se hace un proceso de restauración de ese monte y se mantiene simplemente la carretera necesaria en caso de avería. Pero es que estamos continuamente en la refriega política y ver quién se pone la medalla de ser el más verde.

“El problema de los eólicos en Gipuzkoa es que todos los quieren, pero nadie en su casa. Ese es el resumen”

La reforma fiscal

Reforma fiscal: ¿hay margen para un acuerdo amplio? Dijo el portavoz socialista José Ignacio Asensio que se va a orientar hacia la izquierda.

Esto es la vieja política y no le veo ningún sentido. Todo el día con etiquetas. Pero bueno, al margen de esto, la ponencia fiscal creo que ha sido todo un acierto y gracias a eso vamos a tener una fiscalidad muchísimo mejor. Y quiero agradecer a la sociedad civil todo el trabajazo que ha hecho para presentar propuestas súper interesantes que seguro van a hacer que la reforma fiscal vaya muchísimo mejor encaminada. He visto muchos puntos de encuentro.

¿Han escuchado cosas que les han llamado la atención?

Muchísimas. Y en concreto una del sector primario que me enamoró, y de hecho, como no se apruebe, haré una cacerolada. Y luego hay temas como la pérdida de nivel adquisitivo y la desigualdad social, que también hay que hacerle frente porque va en crecimiento a nivel global. En Gipuzkoa tenemos unos ratios de desigualdad social mucho más bajos, pero que no hay que dejar de atender. 

¿Cuál es esa medida que si no sale hará una cacerolada? 

Se está haciendo mucho hincapié en las dificultades que pasa el sector primario y en todo el trabajo intangible que hacen los baserritarras y el ahorro que nos supone a las arcas públicas el cuidado que hacen del monte y del espacio público. Y a ese trabajo sería darle un valor verde, y pagarles esos intangibles en deducciones. Me pareció increíble y creo que ese proyecto puede ser pionero en el mundo y que nos vaya a copiar todo el mundo.

¿Entonces sí que ha habido cosas novedosas e interesantes? ¿Se puede alcanzar acuerdos?

Por supuesto, todos tenemos el tema de la vivienda más que identificado y hay medidas que se pueden tomar para poder facilitar la entrada a las primeras viviendas en el territorio. Sí hay otra medida, por ejemplo, que queremos poner sobre la mesa también, que seguramente todos estaban de acuerdo, y es que aquellas personas que tienen contratada a una persona en casa para los cuidados, se lo puedan desgravar igual que una empresa que contrata.

Mikel Lezama Javier Colmenero

Terminamos: ¿Cómo se ve dentro de tres años?

Pues espero seguir viéndome a gusto y contento, porque estoy pudiendo llegar a acuerdos entre todos. Cuando yo tengo algo 100% claro y veo que alguien tiene algo 100% claro y es diferente, me parece atractivo porque aprendes. Y me gustaría, en tres años, poder seguir en esta dinámica y que la propia Diputación también entre más en esta dinámica del acuerdo. Y que no lo vea como una amenaza, sino todo lo contrario.