Iñigo Urkullu lo intenta en todos los frentes. El lehendakari ha iniciado este lunes su viaje oficial a Bruselas manteniendo un encuentro con el vicepresidente de la Comisión Europea sobre migración y cultura, Margaritis Schinas, a quien planteó en persona el uso del euskera en el Parlamento comunitario. Pero, al mismo tiempo, en declaraciones a la prensa tras el encuentro, Urkullu deslizó que hay algo más y que ha tocado más puertas. Dijo que ha realizado un nuevo intento con el presidente español, Pedro Sánchez, para que “también ayude” a que el belga Charles Michel, presidente de turno del Consejo de la Unión, impulse algunas reivindicaciones vascas que están sobre la mesa. Ahora mismo están en curso el reconocimiento de las lenguas cooficiales (euskera, catalán y gallego) y la creación de la macrorregión atlántica. Fuentes de Lehendakaritza consultadas por este periódico adelantan que el lehendakari escribió una carta la semana pasada a Sánchez para plantearle esa implicación.
Sánchez acaba de dejar la presidencia de turno que ocupó durante seis meses, hasta diciembre del año pasado. Durante su etapa, ante la presión de sus socios de investidura, la cuestión de las lenguas cooficiales y la macrorregión estuvo en el orden del día de la Comisión de Asuntos Generales. El propio Urkullu consiguió que la macrorregión entrara en el orden del día por los pelos, tras insistirle por teléfono a Sánchez, quien estuvo a un paso de dejar el asunto fuera. La presidencia ha cambiado de manos y ha pasado a Bélgica, donde además Michel tiene medio pie en la campaña electoral de las europeas del 9 de junio, a las que se presenta como aspirante. En este contexto, Urkullu aseguró a los medios que espera que “en una próxima Comisión de Asuntos Generales” se puedan abordar otra vez cuestiones de interés para Euskadi. “Lo espero. En diciembre, durante la presidencia española, yo reivindiqué ante el presidente español estas cuestiones y la macrorregión se metió en el último momento en la lista de temas de la Comisión de Asuntos Generales. He hecho un último intento con el presidente español para que él también ayude a que, en el semestre belga, se impulse lo aprobado en su presidencia”, dijo.
Protección para Aita Mari y los comedores de Zaporeak
Al propio vicepresidente Schinas, en una reunión a la que acudió con la secretaria de Unión Europea y Acción Exterior, Marian Elorza, le planteó la oficialidad del euskera y quedó sorprendido por el elevado nivel de conocimiento que tenía Schinas sobre las propuestas vascas. También en materia de inmigración y asilo, donde el lehendakari compartió con él los detalles del Pacto social para la Migración y le solicitó la protección europea a iniciativas solidarias como la embarcación Aita Mari de salvamento marítimo o los comedores de Zaporeak en Lesbos.
“Hemos puesto sobre la mesa la experiencia de la propuesta Share que en su momento planteé a quien fue presidente de la Comisión, el señor Juncker; y el pacto social vasco sobre la migración, y en último extremo he realizado una explicación del modelo vasco de acogida, que estamos trabajando con el Gobierno español para la transferencia en su etapa final de la integración”, dijo. Planteó la integración de las personas migrantes, y el movimiento ordenado migratorio “en base a las capacitaciones” de cada cual. En materia cultural, “he querido subrayar los pasos que se han dado en el Estado español y los que se vienen dando desde la presidencia de la Unión Europea por parte del Gobierno español, y que tienen que seguir adelante con la presidencia belga en este momento”, recalcó. Se refirió al “impulso a la oficialidad del euskera en las instituciones europeas”.
Sobre política doméstica, al lehendakari volvió a salirle al paso una pregunta sobre el Guggenheim Urdaibai, donde no vio ninguna “contradicción” entre sus palabras y las de Imanol Pradales.
