El hoy portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados y exlehendakari, Patxi López, estuvo en varias ocasiones en el centro del foco mediático del caso Somoto. El entonces lehendakari tuvo dos episodios señalados respecto al caso de la exalcaldesa de Lasarte-Oria, Ana Urchueguía. El primero, cuando la plataforma local había advertido por carta al entonces secretario general del PSE y a otros dirigentes socialistas que “la gestión de la cooperación con Somoto era irregular, opaca y sospechosa de incurrir en ilegalidades, además de moralmente deleznable”.
Ese primer aviso de que algo sucedía con aquella gestión irregular de las ayudas, y que en 2023 ha terminado por llevar a Urchueguía a aceptar una condena por malversación y prevaricación, ocurrió cinco años antes de que el caso estallara en toda su magnitud.
“Con fecha 1 de noviembre de 2006 les fueron remitidas sendas cartas a los señores Miguel Buen, Alberto Buen y Patxi López, informándoles de la gestión de la cooperación con Somoto”, explicó aquellas semanas de 2011 la portavoz de la Plataforma Ciudadana Lasarte-Oria Ana Prieto. Una comunicación que la plataforma volvería a enviar en Navidades, tras una publicación del periódico Diagonal: “Quiero recordar que en esos momentos Patxi López era secretario general de los socialistas vascos; Miguel Buen, de los socialistas guipuzcoanos; y Alberto Buen, de relaciones municipales. Ellos sabrán lo que hicieron con la información, pero lo que no pueden decir es que por ignorancia no sabían”.
La segunda, ya con la publicación del caso en NOTICIAS DE GIPUZKOA, cuando el PNV le interpeló en el Pleno del Parlamento Vasco, apenas una semana después de que este diario empezara a desvelar el resultado su trabajo de investigación periodística. López salió en defensa cerrada de la que era delegada del Ejecutivo vasco en Chile y Perú. Quedó escrito en las hemerotecas: “Están tratando de arruinar la vida de Urchueguía”.
“Han mentido sabiendo que mentían, han publicado falsas entrevistas y han engañado a las personas que aparecen en la información y lo que es más grave, intentaron comprar con dinero respuestas inducidas contra Ana Urchueguía”, acusó López con la solemnidad propia de la Cámara desde la tribuna de oradores, unas insinuaciones que, como las que hizo la bancada socialista en aquellas semanas, quedaron en nada.
Fue el propio jefe del Ejecutivo quien en esa misma sesión del Parlamento Vasco avanzó el 4 de marzo de 2011 que Urchueguía demandaría al Grupo Noticias, “ya que ayer recibimos en la Secretaria General de Acción Exterior una carta remitida por ella anunciando una denuncia judicial contra el grupo de comunicación que ha difundido esas noticias insidiosas en torno a su persona”. Acciones judiciales de las que nunca más se supo.
La defensa cerrada del PSE que ahora ha suspendido de militancia a Urchueguía -primero, de forma cautelar; definitiva cuando la sentencia sea firme- se intensificó aún más apenas un mes después de aquellas palabras de Patxi López, justo con la comparecencia de los periodistas de NOTICIAS DE GIPUZKOA que lideraron la investigación, además del periodista de Onda Vasca Xabier Lapitz (que se desplazó hasta Nicaragua), y de altos cargos del Grupo Noticias.
Una comparecencia parlamentaria en la que representante del PSE en la comisión, la hoy candidata del PSE a diputada general de Araba, Cristina González, no se anduvo con rodeos. Tanto que ni guardó el decoro parlamentario de dar la bienvenida ni saludar a los comparecientes. “Es la primera vez que el Parlamento se reúne en comisión por unos rumores. Espero que retiren sus miserables acusaciones. El lehendakari no insultó a nadie, ni habló sin documentos ni pruebas. Usted es el que miente”, acusó a Lapitz.
